"Parece que no puedo decir nada sin que muchas personas se sientan heridas, ofendidas e incluso decepcionadas€". La frase es de Cristina Pedroche tras su enésima polémica que incendió las redes sociales. La presentadora está harta de que se metan con ella y la pasada semana explotó después de que numerosos tuiteros la criticaran por su concepto de la maternidad.

En una entrevista al diario La Vanguardia, la vallecana confesó algo que ya sabíamos, que está coladita por su marido, David Muñoz, y que si tendría un hijo no le querría tanto como a él: "tendré un hijo y le querré mucho, pero nunca tanto como a David".

Esta declaración desató una oleada de comentarios en Twitter, convirtiéndose en los más comentado de la red social. Pedroche fue tachada de machista y sexista, anque hubo también quien la defendió de estas acusaciones. "¿¿En serio todo este revuelo porque digo a quién quiero y cómo le quiero??", se extraño la presentadora de 'Pekín Express' en su blog.

Lo cierto es que no es la primera vez que Pedroche la lía en las redes sociales sin comerlo ni beberlo. Es una chica sin pelos en la lengua y su nombre, para bien o para mal, se ha convertido en sinónimo de polémica.

Críticas a su físico

Nadie duda de que Cristina Pedroche es una de las presentadoras más sensuales de la televisión. Ha protagonizado varias campañas publicitarias como modelo y nos ha mostrado su físico sin pudor en revistas como 'FHM'.

Precisamente su físico es cada cierto tiempo objeto de debate en las redes sociales. A través del hashtag #laballenadevallecas, muchos tuiteros se cebaron con ella llamándola "gorda". Pedroche respondió: "No me importa nada en absoluto que algunos digan que estoy gorda... Estoy muy feliz con mi cuerpo, con mi constitución y con mi genética".

Hasta su ideología ha levantado ampollas. Votante confesa de Alberto Garzón (IU), llegó a decir que no se sentía muy española, sino "muy vallecana". Y tuvo que salir de nuevo al paso de las críticas. "Me da mucha pena que todo lo que diga, hasta cuando hablo en tono irónico se saque de contexto, se manipulen mis palabras ¡¡¡y todo el mundo se meta conmigo!!! Jamás diría que no me siento española ¡¡porque soy española!! Jamás diría que soy comunista ¡¡porque no soy comunista!!", escribió en su blog personal.

Los vestidos de Nochevieja

Los vestidos de la noche de fin de año de Cristina Pedroche son otro de los asuntos con los que ha tenido que lidiar la colaboradora de 'Zapeando'. Desde que dejara al descubierto su ropa interior con el sugerente modelo que lució en las campanadas de 2015, la expectación fue 'in crescendo' a lo largo de todo el año por lo que llevaría puesto en las campanadas de 2016.

De nuevo dejó boquiabiertos a los espectadores con otro atrevido vestido, igual o más sexy que el anterior. También en esta ocasión tuvo que justificarse. "Me visto como quiero y como me apetece en cada momento. La gente (no quiero hacer diferencia entre mujeres y hombres porque para mí sólo existen personas) que me critica porque en Nochevieja decidiera ponerme ese vestido, supongo que también me critica cuando en Zapeando me pongo un vestido corto o un escote€.", señaló.

Uber y el pato asado

No solo su físico o sus declaraciones generan polémica. Pedroche tuvo que aclarar que ella coge taxis cuando Uber, la aplicación que contacta a usuarios con conductores, utilizó unas imágenes suyas para promocionarse.

David Muñoz, por su parte, se mantiene al margen de las filias y fobias que despierta su mujer. No obstante, también se ha visto arrastrado por su influencia, como cuando colgó en Twitter una imagen del pato asado que estaba a punto de devorar en el restaurante Noma de de Copenhague. El aspecto que presentaba el animal disgustó a muchos usuarios de las redes sociales.