Camino a las urnas

El adelanto electoral dificulta la implantación de las primarias para confeccionar las listas

Pedro Sánchez, el pasado martes en la Moncloa.

Pedro Sánchez, el pasado martes en la Moncloa. / David Castro

Miguel Ángel Rodríguez

Dejar en manos de la militancia todo el poder para confeccionar las listas electorales es, cada vez más, algo habitual, aunque sigue siendo una 'rara avis' para las grandes formaciones. No obstante, el adelanto electoral anunciado por Pedro Sánchez el lunes dificulta que esta práctica de democracia interna vaya arraigando. Con apenas 20 días para presentar los listados ante la Junta Electoral, formaciones como ERC o el espacio que está construyendo Yolanda Díaz a la izquierda del PSOE han asumido que no hay tiempo suficiente para poner en marcha estos procesos. Tan solo PNV y Bildu consultarán a sus bases.

PNV y EH Bildu consultarán a sus bases y Junts cancela el proceso tras la renuncia de Giró

La publicación en el Boletín Oficial del Estado del real decreto de disolución de las Cortes -Congreso y Senado- el pasado martes activó una cuenta atrás frenética que apenas deja 10 días para conformar coaliciones (el caso de Díaz y Sumar) y otra decena más para presentar las candidaturas ante la Junta Electoral. Esta convocatoria contrarreloj llevó a ERC a proclamar directamente al actual portavoz de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián, como candidato al 23-J. El diputado republicano sí fue elegido en primarias en 2019, antes de las pasadas elecciones.

La decisión de prescindir de este proceso puede resultar más traumática en el espacio que está intentando construir la vicepresidenta segunda con Sumar como paraguas de una decena de organizaciones. Las primarias han sido una de las señas de identidad de Unidas Podemos y de formaciones como Compromís o Más País, formaciones llamadas a aliarse con Díaz, hasta el punto de que han provocado una de los principales roces de los morados con la ministra de Trabajo. Sin embargo, ante el actual reto de tener que negociar toda una coalición en diez días, casi todas las partes han asumido que será imposible usar este método para confeccionar las listas y que tocará elegir los nombres a dedo. Aun así, no descartan buscar una ratificación posterior de sus militancias.

Preguntar a las bases

Pese al escaso margen para convocar unas primarias, dos formaciones sí han decidido apurar los plazos y mantener este mecanismo: PNV EH Bildu. La dirección de la formación jeltzale ha remitido a las organizaciones territoriales de las tres provincias vascas y Navarra una lista con los candidatos. La militancia podrá incluir nuevos nombres y establecer el orden que deseen. Aun así, se espera que Aitor Esteban vuelva a ser el candidato y revalide la portavocía que ocupa desde 2012. Fuentes de la formación abertzale también explican que "la dirección presentará una propuesta, en la que los militantes pueden presentarse y luego se votará".

Junts también tenía planteada activar las primarias para elegir a la cabeza de lista para las elecciones generales. El puesto se lo iban a disputar la actual portavoz en la Cámara baja, Miriam Nogueras, y el 'exconseller' Jaume Giró, cabeza visible del sector moderado. No obstante, el 'expresident' Carles Puigdemont bendijo a la primera, alegando que unas primarias no eran oportunas teniendo en cuenta los plazos, y el segundo a acabado retirándose, por lo que no se celebrarán.

El método desconocido

Donde las primarias ni se han planteado es en PSOE, PP y Vox. Los socialistas y conservadores celebran elecciones primarias para elegir al secretario general o al presidente del partido, respectivamente, y ambos son quienes encabezan las candidaturas, pero estos procesos, que no van ligados a la celebración de comicios, nunca se emplean para conformar el conjunto de listas que se presentan a las generales. Vox ni siquiera utiliza estos mecanismo para elegir al presidente del partido.