PP y Unidas Podemos han reclamado este lunes una investigación sobre las 23 muertes, según el balance oficial, que se produjeron el pasado viernes en la valle de Melilla del lado marroquí cuando cerca de 2.000 personas intentaron cruzar a suelo español. En una combinación poco habitual, populares y morados han coincidido en la necesidad de esclarecer lo ocurrido. Los conservadores, más contundentes, han exigido también que Pedro Sánchez se retracte de sus palabras cuando dio por "bien resuelto" el salto a la valla por parte de la gendarmería marroquí.

El portavoz de Unidas Podemos en el Congreso, Pablo Echenique, ha asegurado que están "horrorizados" tras las imágenes publicadas y ha sostenido que "España tiene que estar a la vanguardia de los Derechos Humanos" liderando una "investigación independiente". El dirigente morado ha señalado que diversas organizaciones humanitarias están avisando de que Marruecos podría estar intentando tapar esta tragedia y que es necesario identificar los cadáveres, informar a la familia y darles una sepultura digna.

"No puede ser que el control de flujos migratorios desemboque en decenas de muertos a las puertas de nuestra casa", ha insistido Echenique tras anunciar que han registrado una proposición no de ley en la que instan al Gobierno a "abrir de modo inmediato una investigación independiente para esclarecer esta tragedia humana y derivar las correspondientes responsabilidades políticas y penales en colaboración con las delegaciones diplomáticas de la Unión Europea presentes en territorio marroquí".

No obstante, los morados han evitado criticar en todo momento el discurso de Sánchez, repetido este lunes por distintos dirigentes del PSOE, según el cual la respuesta de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado fue la correcta ante el asalto y culpando a las mafias migratorias. En las filas de Unidas Podemos existe bastante malestar con la posición adoptada por el socio mayoritario, pero descartan la idea de romper el Gobierno por esta cuestión.

"No pasar página"

Por su parte, el comité de dirección del PP ha aprobado una declaración institucional que "deplora" la tragedia vivida el viernes en la valla de Melilla, con un balance de 23 fallecidos y exige al presidente del Gobierno "retractarse urgentemente" de las palabras que dijo el sábado, cuando dio por "bien resuelto" el desenlace con la colaboración de la policía marroquí. "Ninguna muerte en esas circunstancias puede resultar indiferente. Pedimos que se retracte ya de esa aseveración”, ha insistido Esteban González Pons tras la reunión de la cúpula conservadora.

El PP cree que se deben "esclarecer todas las circunstancias" que llevaron al "trágico desenlace" y conocer si el Ministerio del Interior "disponía de información sobre lo que iba a ocurrir". Pons también ha insistido en que debe "precisarse el estado de la política de cooperación con Marruecos".

A pesar de que los populares evitan detallar en qué Ministerio debe abrirse esa investigación, Pons sí ha reclamado "no pasar página con tantos muertos", reprochando en distintos momentos las declaraciones de Sánchez el pasado sábado en Moncloa. "Es el presidente del Aquarius, hay que recordarlo", ha dicho Pons, que considera "que algo no funciona bien en este Gobierno de socialistas y morados" si la coalición cree que lo que se vivió el otro día en Melilla “es un asunto bien resuelto”.

A ojos del PP “lo imprescindible” es “intensificar la previsión y las alertas tempranas” para que no se produzcan estas concentraciones, aunque Pons ha evitado en todo momento referirse a cómo procedieron las autoridades marroquís en vista de las imágenes. En la declaración institucional, que tiene ocho puntos, los populares han vuelto a insistir en reclamar al Gobierno, como figuraba en su propuesta de pacto de Estado sobre la seguridad nacional, que en la cumbre de la OTAN se exija a los aliados incorporar al nuevo Concepto Estratégico “la protección de la integridad territorial de todos los Estados miembros” para que no quepan dudas sobre el perímetro asegurado por la Alianza, mirando a Ceuta y Melilla.