Puesta de largo de Catalunya En Comú para aupar a la vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz. Los 'comuns' han exhibido este domingo su sintonía con el proyecto que anida la ministra, todavía lleno de incógnitas, invitándola al cierre de su tercera asamblea en Barcelona y reeditando así el acto que tuvo lugar en València la semana pasada para aunar a las izquierdas bajo su 'frente amplio'.

De hecho, los morados han ratificado la ponencia que sustenta que "ganar pasa por hacer a Díaz la próxima presidenta del Gobierno de España". ¿Cómo? "Abriéndose a nuevas alianzas que cualitativamente representen mucho más que la suma de las partes" y "convirtiendo un potencial liderazgo en proyecto y sujeto político".

En esta ocasión, la líder de Podemos, Ione Belarra, sí ha intervenido a través de un vídeo y ha asistido personalmente la secretaria de organización, Lilith Verstrynge. A la clausura también han acudido el ministro de Consumo, Alberto Garzón; la vicepresidenta de la Generalitat valenciana, Mónica Oltra, así como las coordinadoras del partido en Catalunya que han revalidado su cargo, Jéssica Albiach, Ada Colau y Candela López reflejado las tres sensibilidades políticas dentro del espacio -Barcelona en Comú, Podem e ICV- para evidenciar una fuerza cohesionada y dejar atrás las divisiones que en el pasado generaron tensiones internas.

"Contad con Cataluña"

En su discurso, Albiach ha ensalzado que "progresismo y plurinacionalidad, federalismo, son la misma cosa" y ha apostado por tejer alianzas para ensanchar este espacio político. Dirigiéndose directamente a Díaz, ha remachado: "Contad con Cataluña para transformar España. Los procesos de transformación no se construyen de espaldas y a la contra, sino de la mano y a favor de la gente. Nosotras no solo nos necesitamos, es que también nos queremos".

Díaz, aclamado a gritos de "presidenta", ha recogido el guante y ha deslizado que "toca volver a ser la vanguardia, colocar Cataluña en el centro", desatacando la labor de Colau al frente del consistorio y pidiéndole que vuelva a ser candidata en las elecciones del 2023.

La también ministra de Trabajo ha apostado por una España plurinacional en la que se respeten todas las lenguas cooficiales, ha puesto en valor la política "artesanal" aquella que "tiende puentes" desde el diálogo, "la única herramienta para cambiar la vida y las sociedades". "El diálogo es más lento, pero es tenaz, construye y legitima. Frente a los que decían que solo hay una Cataluña; hay dos, hay muchas", ha añadido, poniendo el "bien común" por encima de la división 'procesista'.

Díaz ha sacado pecho de su tarea en el Gobierno, dejando claro que el Ejecutivo ha destinado 3.232 millones de euros a los ertes en Catalunña, constatando así "el valor de lo público". "Sí se puede gobernar para la mayoría social", ha enfatizado, apremiando a la vez a la reforma laboral.

Federalismo y ecofeminismo

Colau, por su parte, ha vuelto a exigir la regulación de los alquileres y ha dicho que su obra de gobierno demuestra que se pueden liderar las instituciones de forma distinta. Así, ha llamado a construir "alianzas plurinacionales" para consolidar el proyecto de la vicepresidenta: "Díaz no quería ser presidenta ni una líder mundial, pero le ha tocado [...] España necesita a Díaz, es un matrimonio colectivo", ha zanjado.

Belarra, a través de un vídeo, ha definido la próxima etapa como "apasionante y esperanzadora" para "reconstruir lo que no funcionaba bien, cimentar el futuro de las próximas generaciones". "Necesitaremos todas manos, ideas y miradas transformadoras para pilotar un proyecto ecofeminista y un nuevo modelo económico social", ha aseverado.

Oltra, por su parte, ha llamado a romper la "falsedad del dogma neoliberal de que las derechas gestionan mejor". "Es mentira, gestionan fatal, hacen políticas profundamente egoístas e insolidarias. Y son malos gestores, por no hablar de que son unos corruptos", ha afirmado, apostando por una transformación ecológica y descartando así la ampliación de puertos y aeródromos.

La nueva hoja de ruta de la formación pasa por defender un Estado republicano y plurinacional, por blindar la mesa de diálogo entre gobiernos -sin referéndum a corto plazo-, por la ampliación y el fortalecimiento del autogobierno catalán, por un nuevo sistema de financiación, por el ecologismo y el feminismo como guía de transformación de la política y por un nuevo plan para la recuperación económica que sea sostenible y noquee las desigualdades acompañado de un "escudo social" en cuanto a los servicios públicos.

Los presupuestos

Aunque no han querido inquirir en ello, los 'comuns' se reunirán esta tarde a las 16 horas con el Govern para intentar atar su apoyo a los presupuestos y salvar así el primer trámite en el Parlament tras el veto a la CUP. A su vez, reclamarán que Esquerra retire también su enmienda a la totalidad de las cuentas en el Ayuntamiento de Barcelona. Sobre la mesa, los morados proponen multiplicar la inversión en la red ferroviaria para llegar hasta los 600 millones en cuatro años poniendo en funcionamiento nuevas líneas de trenes y ampliar la T-Jove hasta los 30 años y la T-16 hasta las seis zonas. Además, solicitan 1.500 millones de euros en cinco años para "crear espacios verdes", prestar mayor atención a la salud mental y unos 300 millones de euros para un dentista público. En cuanto al Hard Rock y a los Juegos Olímpicos de Invierno, quieren que el Govern se eche atrás y apueste por un cambio de modelo productivo que sea más sostenible.