El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, ha trasladado la "preocupación" con la que la Casa Blanca ve el hecho de que Rusia pueda "repetir" una invasión hacia Ucrania, como ya hizo en 2014 con la península de Crimea.

"No tenemos claridad sobre las intenciones de Moscú, pero conocemos su libro de jugadas (...) Nuestra preocupación es que Rusia pueda cometer el grave error de intentar repetir lo que emprendió en 2014, cuando acumuló fuerzas a lo largo de la frontera, cruzó el territorio soberano de Ucrania y lo hizo alegando, falsamente, que fue provocado", ha expresado Blinken en el marco de una reunión con su homólogo ucraniano, Dimitro Kuleba, apunta el Departamento.

La invasión del territorio situado en el mar Negro por parte de Rusia fue criticado por una gran mayoría de la comunidad internacional, e incluso derivó en la expulsión de Moscú del G8, además de una serie de sanciones, recoge el diario estadounidense 'The Hill'.

Blinken ha remarcado que la Administración del presidente Joe Biden ha destinado más de 409.000 millones de dólares --más de 356.000 millones de euros-- en ayuda a Ucrania y que el Congreso ha aceptado la solicitud de otros casi 400 millones de dólares --cerca de 350 millones de euros-- para el próximo año fiscal.

"Trabajaremos con el Congreso, asegurándonos de continuar brindando la asistencia de seguridad que Ucrania necesita, incluidas las armas defensivas letales para defenderse de cualquier agresión rusa", ha trasladado Blinken.

Por su parte, Kuleba ha expresado que agradecido el compromiso de Washington con Kiev frente a las posibles agresiones de Rusia y así como por la noticia de continuar con la cooperación en defensa y seguridad.

"La mejor manera de disuadir a una Rusia agresiva es dejarle claro al Kremlin que Ucrania es fuerte, pero también que tiene aliados fuertes que no la dejarán sola ante la creciente agresividad de Moscú", ha zanjado Kuleba.

Reunión de Sullivan y críticas de la embajada

Por otro lado, la Casa Blanca ha informado de que el asesor de Seguridad Nacional, Jake Sullivan, ha mantenido un encuentro este miércoles con el jefe de la Oficina Presidencial de Ucrania, Andriy Yermak y con el propio Kuleba.

"Han discutido el progreso realizado en las prioridades bilaterales identificadas por el presidente Biden y el presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, en su declaración conjunta del 1 de septiembre. Ambas partes acogieron con beneplácito el relanzamiento del 10 de noviembre de la Comisión de Asociación Estratégica bilateral, así como la cooperación en curso en materia de seguridad energética, reforma de la gobernanza y lucha contra la corrupción", ha expresado el Gobierno estadounidense.

Sullivan, al igual que Blinken, ha hecho especial hincapié en el compromiso "inquebrantable" de Estados Unidos con "la soberanía y la integridad territorial de Ucrania", y ha acogido con satisfacción el compromiso de los funcionarios ucranianos con la resolución del conflicto en Donbás.

Ante estas reuniones, la Embajada de Rusia en Washington ha criticado a la Administración Biden por no disuadir a Ucrania sobre la posición belicista en Donbás.

En este sentido, el embajador, Anatoli Antónov, ha lamentado que los planes de la Casa Blanca para proporcionar armas a Kiev "no harán sino agravar la situación en el sureste de Ucrania".

"Pensamos que se ha desaprovechado otra oportunidad para obligarle a Kiev a que pare la guerra", ha zanjado Antónov en un comunicado lanzado en sus redes sociales.