La ministra de Política Territorial y portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, ha acusado a Vox de saltarse el reglamento del Congreso de los Diputados y deteriorar las instituciones al negarse el martes a abandonar el pleno un diputado de esta formación que había insultado a una parlamentaria socialista.

El vicepresidente primero del Congreso, Alfonso Rodríguez, suspendió el martes durante unos minutos la sesión del pleno después de que el diputado de Vox José María Sánchez García insultara a la parlamentaria socialista Laura Berja, a la que llamó "bruja", mientras ésta defendía la iniciativa de su grupo sobre el acoso que sufren las mujeres cuando acuden a interrumpir su embarazo.

En la sesión de control de este miércoles, la ministra de Política Territorial y portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, le ha dicho a la diputada de Vox Macarena Olona durante una pregunta formulada por ésta que "no están tan lejos de los independentistas a los que critican".

"Porque cuando se saltan el reglamento de esta cámara y no cumplen con las normas, están deteriorando las instituciones y con ello debilitando al Estado", ha añadido en referencia al episodio del día previo.

Olona ha criticado que a la sesión de este miércoles no hayan asistido 17 miembros del Gobierno de España, entre ellos el presidente, Pedro Sánchez, que participa en la Asamblea General de la ONU en Nueva York, lo que considera un "insulto" para la Cámara y los españoles.

"Para insultos los que profirieron este martes a una diputada socialista", le ha respondido la portavoz del Gobierno.

"Preguntan al Gobierno y el Gobierno responde. Atiendan al reglamento de la Cámara, ayer descubrí que no lo tienen asumido e interiorizado y no lo respetan en absoluto", ha añadido.

En su intervención, ha pedido a Vox que deje de "enfrentar a unos españoles frente a otros" y que "sean respetuosos con los medios de comunicación y sus profesionales", después de que Olona se encarara el martes con una periodista cuando le volvió a preguntar en los pasillos del Congreso por el insulto.

"Este Gobierno no se va cansar de trabajar para avanzar en derechos y para ampliar mayorías que impidan que puedan traer a este país sus planteamientos retrógrados que nos hacen retroceder siglos a la sociedad española", ha asegurado. 

Violencia política

Ppor su parte, la ministra de Igualdad, Irene Montero, ha denunciado la "humillación" y "violencia política" contra las mujeres ejercida este martes en el Congreso y ha lamentado que lo sucedido en el Pleno del Congreso de los Diputados fue una "clarísima falta de respeto institucional".

"Es una constante de los grupos de la oposición. Creo que oposición es una palabra que le viene grande al PP y a Vox", ha aseverado la ministra, que ha denunciado que el PP "se ha salido hace mucho de la cancha de juego de la democracia".

A su juicio, el partido de Pablo Casado está haciendo "seguidismo" a Vox. "Tratar de humillar y cuestionar en sede parlamentaria, en las sedes institucionales, igual que hacen en las calles, en los centros de trabajo... blanquear y legitimar la posibilidad de humillar y ejercer violencia política contra las mujeres".

En el mismo sentido se ha pronunciado la consejera catalana, que ha afirmado que este tipo de insultos se deben entender como un acto específico de violencia política que se ejerce contra las mujeres con la voluntad de humillar con calificativos como "bruja, gorda o puta".

"Son los adjetivos que las que estamos en política recibimos cuando se nos quiere desacreditar", ha denunciado.

Montero ha defendido que desde el Ministerio trabajan para defender la garantía de los derechos de las mujeres y para poder hacerlos efectivos en todo el territorio, mientras que "es una práctica demasiado habitual en la oposición oponerse a todos los avances en los derechos de las mujeres".