La sección primera de la Audiencia Provincial de Castellón ha condenado a un hombre a 11 años de prisión por abusar sexualmente de la hija de su pareja desde que esta tenía 5 años y hasta 2019.

La sentencia condena al hombre por un delito continuado de abuso sexual a menor de 16 años y le prohíbe aproximarse a ella a una distancia inferior a 500 metros y de comunicarse con la misma durante un tiempo superior en 6 años al de la duración de la pena de prisión impuesta.

En concepto de responsabilidad civil, el procesado deberá indemnizar a los representantes legales de la menor con 12.000 euros por daños morales y secuelas.

La sentencia establece como probado que el acusado convivió durante unos 15 años con su pareja sentimental y también con la hija biológica de la mujer desde que la menor tenía 3 años, con la que, desde que tenía 5 años y hasta 2019, mantuvo frecuentes episodios de naturaleza sexual.

Dichos episodios solían producirse cuando su madre no estaba en la casa o cuando esta se iba a dormir, y tenían por escenario la cama matrimonial o el sofá del salón, y también cuando iban a la playa sin que les acompañase su madre, en el interior del coche y en el trastero de una de las casas.

Tales hechos se sucedieron hasta el mes de junio de 2019, en que, por causa de ser Testigos de Jehová y querer bautizarse por tal rito, convinieron en que no volverían a suceder. No obstante, en enero de 2020, el acusado volvió a requerir a la hija de su pareja con el pretexto de que conocía algo importante que la afectaba, en concreto una fotos íntimas de la misma.

Esto llevó a la menor, que ya no quería que se repitiera, a contarlo que sucedía a una amiga del centro escolar al que asistía y finalmente a parte del profesorado del mismo, provocando así la denuncia de los hechos.