La autopsia provisional de la joven de 20 años fallecida con Covid-19 en el Hospital Costa del Sol de Marbella ha confirmado que la paciente sufrió una afectación pulmonar y cerebral, tal y como aparece en el diagnóstico del centro sanitario, que indicó como causa inicial o fundamental un "tromboembolismo pulmonar masivo", como inmediata un "edema cerebral" y como causa intermedia, el contagio por Covid-19.
Los resultados del informe anatomopatológico del servicio de Anatomía Patológica del Hospital Reina Sofía de Córdoba concluyen que la fallecida presentaba pulmones de aspecto hemorrágico con material parcialmente trombótico, derrame pleural hemático bilateral, derrame pericárdico hemático y cerebro edematoso con signos de herniación infratentorial.
Por otro lado, se han extraído muestras de pulmón, tráquea, bronquios y seno frontal para confirmar, mediante PCR, el contagio por Covid-19.
La forense detalla, en función de la información recibida por parte de la Unidad de Medicina Intensiva del Hospital Costa del Sol de Marbella, que la fallecida, sin alergias a medicamentos conocidas, padecía obesidad mórbida, cifoescoliosis, amenorrea, retraso mental leve, trastorno de la conducta y síndrome ansioso-depresivo por el que estaba en tratamiento desde abril de este año.
El 25 de julio, la joven, natural de Estepona, acudió a urgencias debido a que sufría náuseas, vómitos, diarrea, cansancio y disnea (sensación de falta de aire). Se le realizó una analítica, una radiografía, un TAC y una PCR que salió negativa. Entonces recibió el alta, siendo diagnosticada de gastroenteritis aguda para el que se le recetó tratamiento con omeprazol, primperán y paracetamol.
Lejos de mejorar, la joven empezó a sufrir mialgias, cefalea, escalofríos, odinofagia (dolor al tragar) y tos, por lo que acudió al centro los días 3 y 5 de agosto. Se le realizó una segunda PCR que, en este caso, dio positivo. El informe añade que la paciente fue dada de alta con vigilancia domiciliaria.
El 7 de agosto, "por persistencia del cuadro con intolerancia oral y malestar general", la familia decidió regresar al hospital, sufriendo la joven un presíncope antes de salir de casa. Por la tarde, la joven ingresó en la UCI en situación de fallo respiratorio, hemodinámico y hematológico junto con disfunción neurológica", falleciendo a las 1:40 horas del día 8 de agosto.
Este caso fue denunciado por la Asociación del Defensor del Paciente a la Fiscalía de Málaga por "presunta negligencia médica", debido a que la paciente acudió hasta en siete ocasiones al hospital y a su centro de salud, "sin que quedara ingresada hasta el último día en que falleció", según expresan desde la entidad.
Los familiares de la paciente, a través del abogado Damián Vázquez, colaborador del Defensor del Paciente en Málaga, se han personado como acusación particular en el Juzgado de Instrucción nº1 de Marbella, al que solicitaron como prueba la práctica de autopsia del cadáver, admitida por el Juzgado. La familia ya ha recibido la autorización para incinerar o enterrar el cadáver.
"Esto es un informe provisional, se han tomado unas muestras y hay que realizar un estudio histológico para ver cuál es la causa del fallecimiento. Tendremos que esperar al informe definitivo y también al informe que pueda hacer el médico forense del juzgado para determinar si efectivamente, como queremos que se investigue, se ha llevado a esa situación por no haberla tratado", explica el letrado Damián Vázquez.
Por tanto, aún están a la espera de los informes definitivos de toxicología, la finalización de los estudios macroscópicos e histológico, así como la valoración de un Médico Forense del Instituto de Medicina Legal y Forense, para que valore la asistencia médica recibida por la paciente y determine si existió una "posible negligencia médica" y, en su caso, según añaden desde el Defensor del Paciente, un "delito de homicidio por imprudencia médica profesional".
