La intención del Ministerio de Sanidad de acordar unas medidas de obligado cumplimiento y comunes, en función de la incidencia de covid, en la hostelería, el ocio nocturno y los actos masivos, al menos hasta el final del verano, ha fracasado completamente. Para lograr el consenso que no consiguió la semana pasada, Sanidad ha admitido este miércoles, en el Consejo Interterritorial, que las limitaciones en la apertura de discotecas y en la celebración de actos multitudinarios sean meras recomendaciones. Y antes del inicio de la reunión con los consejeros, ya había aceptado que las restricciones a la hostelería desaparezcan del Documento de Actuaciones Coordinadas (DAC) que será publicado, previsiblemente, mañana en el Boletín Oficial del Estado (BOE).

De esta forma, sectores clave para la economía y el turismo quedarán en manos, otra vez, de los gobiernos regionales, que podrán regirse, eso sí, por las recomendaciones acordadas en algunos ámbitos. Y es que incluso durante el estado de alarma, había un toque de queda y la limitación a seis personas en las reuniones en toda España, pero las decisiones sobre la hostelería, con incidencias mucho más altas, siempre estuvieron en manos de las autonomías.

Con esta rectificación, Sanidad ha logrado que el documento de actuaciones sea aprobado por unanimidadsalvo por Euskadique ha decidido no participar ni en la discusión ni en la votación, como ya hizo el pasado miércoles cuando se aprobó, con el voto en contra de Madrid, Cataluña, Murcia, Galicia, Andalucía y la abstención de Castilla y León una guía con limitaciones de “obligado cumplimiento”, según reiteró la ministra tras la reunión semanal del Consejo Interterritorial. De hecho, pese a las protestas y la amenaza de incumplimiento de varias autonomías gobernadas por el PP, con Madrid a la cabeza, el sábado fue publicado en el BOE.

Los tribunales

Pero el lunes la Audiencia Nacional dio la razón al Ejecutivo encabezado por Isabel Díaz Ayuso y suspendió, de forma cautelerísima, la aplicación de las restricciones obligatorias en este territorio, lo que hizo a Sanidad, que siempre ha afirmado que no pretendía dar la batalla en los tribunales, dar marcha atrás y buscar una desescalada consensuada. La ministra, Carolina Darias, ha argüido este miércoles que lo que se elevó hace siete días al Consejo era sólo una “propuesta” porque el “ministerio no impone nada” y que, tras un proceso de “escucha activa” con las autonomías y los sectores implicados, finalmente se ha aprobado una “revisión”. “Es verdad que a veces no es fácil, pero hoy teníamos la determinación de que la salida tenía que ser conjunta “, ha señalado, sin aclarar por qué ese consenso no se buscó ya la semana pasada.

Y la intención del Ministerio, antes de la reunión de esta tarde, era que en el ocio nocturno sí hubiese ciertas restricciones comunes. El borrador elaborado por Sanidad indicaba que las discotecas y salas de fiesta sólo pudieran abrir hasta las tres de la mañana y en las regiones que se encuentren en una incidencia por debajo de 150 casos por 100.000 habitantes a 14 días. Pero finalmente sólo se incluirán recomendaciones, al igual que para la celebración de actos masivos.