La Unidad de Asuntos Internos de la Policía Nacional ha entregado un informe al juez que instruye el caso Tándem en el que aseveran que el comisario José Manuel Villarejo no usó bases de datos policiales para el encargo que le realizaron entre 2011 y 2012 desde Repsol y Caixabank para indagar en las maniobras del entonces presidente de Sacyr, Luis del Rivero.

El informe, adelantado por 'Voz Populi' y al que ha tenido acceso EP, está fechado en abril de 2021 y responde a un requerimiento del titular del Juzgado Central de Instrucción número 6, Manuel García-Castellón, de noviembre de 2020 en el que indicaba que quería saber si en este proyecto del comisario (proyecto Wine) se accedió a ese tipo de bases que son de carácter restringido y que podrían haber permitido la obtención de información reservada.

Pero Asuntos Internos ventila el encargo del juez en tres páginas señalando que entre la documentación relacionada con Wine no se ha identificado "con claridad" aquella que pudiera haberse obtenido de ficheros policiales. Eso sí, apuntan que sí se ha acreditado que parte de la información comercializada por la empresa que usaba Villarejo para sus trabajos (Cenyt) "se había obtenido de archivos ajenos al Cuerpo Nacional de Policía, algunos de ellos públicos y otros de carácter restringido, en concreto conseguidos de compañías telefónicas.

Esta línea de investigación, la pieza 21 de Tándem, se abrió a finales de 2019 con el objetivo de analizar el encargo presuntamente ilícito del comisario para la energética y para la caja catalana. Ambos querían "salvaguardar" sus intereses como aliados empresariales en un contexto de pugna entre accionistas de referencia en Repsol YPF para tomar el control de la compañía. Repsol y Caixabank recurrieron a los servicios de Villarejo porque querían evitar que Del Rivero, mediante acuerdo con la mexicana Pemex se hiciese con el control del consejo de administración presidido por Antonio Brufau.

Desde que se abrió la pieza, han desfilado por la Audiencia Nacional en calidad de imputados tanto el que fuera presidente de Caixabank Isidro Fainé como el presidente de Repsol, Antonio Brufau. Además de ellos, son investigados el que fuera director de Seguridad Corporativa de Repsol Rafael Araujo y al ex jefe de Seguridad de CaixaBank Miguel Ángel Fernández Rancaño --ambos comisarios, uno en excedencia y otro jubilado--, además de Villarejo, su socio Rafael Redondo y el ex subdirector de Seguridad de Repsol Rafael Girona Hernández.

Pero con este nuevo informe, Asuntos Internos marca diferencias sustanciales entre el proyecto Wine y otros encargos realizados por el comisario, en los que se sí tiró de manera evidente de bases policiales, como en el caso de la pieza separada relativa a BBVA.

Tráfico de comunicaciones

Con todo, la policía sí que explica que Villarejo venía obteniendo con carácter habitual el tráfico de las comunicaciones telefónicas de las personas a las que investigaba a través del que fuera jefe de la Unidad Central de Apoyo Operativo (UCAO) Enrique García Castaño, dado que éste, "merced a su puesto de trabajo, disponía del contacto habitual con las compañías telefónicas".

Ya en noviembre, en el auto por el que imputaba los responsables de seguridad de las compañías, el juez señalaba que, gracias a lo intervenido, se había tenido conocimiento de que Villarejo y Redondo se hacían con información de los investigados por medio de "la obtención y análisis de su tráfico de llamadas telefónicas". "Lo que implica el acceso a la conservación de datos a los que las compañías telefónicas vienen obligadas de acuerdo con lo establecido en la Ley (...) y sin que conste que Villarejo disponga de la autorización judicial con fines de detección, investigación y enjuiciamiento de delitos graves", señalaba.

Ahora, para el requerimiento del juez, la UAI revisó los accesos a bases policiales en el periodo de noviembre de 2011 a junio de 2012 en relación a un total de trece números de teléfono y cuatro personas (entre ellos del Rivero y su mujer). Tras recibir respuesta del Área de Informática de la Unidad de Informática y Comunicaciones, apuntan que los resultados del análisis "no arrojan ningún positivo respecto a Luis del Rivero", mientras que respecto de su mujer hay dos 'positivos' pero que coinciden con la renovación de su DNI. Sí hubo varios positivos sobre el responsable de Seguridad de Sacyr Rodrigo Álvarez Vázquez pero "sin aparente vinculación con los hechos objeto de investigación", y cinco sobre el antiguo director financiero de Repsol YPF Fernando Ramírez Mazarredo.