Los independentistas catalanes han utilizado la tribuna del Congreso para emplazarse a llegar a un acuerdo de Gobierno en Cataluña, diez días después de las elecciones en las que los socialistas fueron la fuerza más votada, aunque empataron a escaños con ERC (33) y casi con JxCat (32).

Con la comparecencia de Pedro Sánchez en el pleno para informar de la evolución de la pandemia en medio del estado de alarma, las tres formaciones secesionistas más Unidas Podemos han hecho causa común sobre la urgencia de lograr un pacto para gobernar Cataluña, y también ha intervenido el presidente del Gobierno al defender la victoria de Salvador Illa.

En respuesta, el portavoz de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián, ha asegurado que "la Generalitat de Cataluña no es una liga" y que, de hecho, "las elecciones no las gana quien gana, sino quien puede gobernar… y quien puede es ERC".

Por eso, en su segunda intervención, ha pedido formar "un frente amplio con todo el mundo para seguir con el proceso y el movimiento político independentista republicano con preponderancia de las izquierdas en Cataluña".

Completaba así su primera advertencia de que el suyo es un partido de gobierno, "no de oposición", con todo lo que eso conlleva "y con las enormes contradicciones y responsabilidades" que supone el republicanismo que defienden. "La izquierda a la que representamos está llamada a gobernar en nuestro país", ha subrayado.

También la portavoz de JxCat, Miriam Nogueras, ha puesto el acento en la urgencia de lograr un pacto en Cataluña, aunque ha descartado totalmente al PSOE como pieza en este tablero al asegurar que el Gobierno de España "sea del color que sea" "es un peligro para las libertades y es anticatalanista" y que la única vía posible es la independencia, la cual ahora cuenta con el apoyo del 52 por ciento de los catalanes.

Según Nogueras, solo es posible conseguir la independencia con la unión de las fuerzas separatistas: "Compañeros independentistas, el futuro de nuestro país está en nuestras manos, no cometamos el error de seguir dejándolos en las suyas", ha avisado en catalán.

Para la CUP, que obtuvo 9 diputados en los comicios, es evidente que se ha ganado en las urnas "más independencia y más izquierda" y con esas cartas son con las que hay que jugar, ha señalado la diputada Mireia Vehì, quien ha advertido a Junts que va a tener que atenerse a esas políticas de izquierda si quiere entrar en la Generalitat y a los comunes (8 escaños) aceptar las demandas de autodeterminación.

Pero no solo ha lanzado un aviso a JxCat y a los comunes, sino también a ERC, que "va a tener que moverse" como los otros y se ha preguntando, por ejemplo, qué va a hacer cuando el Tribunal Constitucional "tumbe" una ley aprobada por el Govern.

En esta ecuación ha entrado también el portavoz de Unidas Podemos, Pablo Echenique, al destacar la victoria de la izquierda en las urnas catalanas, lo que brinda la posibilidad de poder formar un ejecutivo de izquierdas: "Ojalá compañeros de ERC, no perdamos esta oportunidad", ha señalado.