El ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, José Luis Ábalos, ha rechazado este lunes el control de precios del alquiler en la futura Ley de Vivienda, como plantea su socio de Gobierno, Unidas Podemos, y ha apostado por promover incentivos fiscales, para los cuales espera aún el visto bueno del Ministerio de Hacienda.

En rueda de prensa tras la Ejecutiva Federal del PSOE en la sede del partido en Madrid, Ábalos ha reconocido que, en materia de "intervención de los precios" ambas formaciones tienen "dos concepciones distintas" y, en su caso, consideran "más positivo y eficaz promover que no imponer".

"Lógicamente, los más ocurrentes son los (incentivos) fiscales, aunque también puede haber otras medidas, que no imponer", ha explicado el ministro titular de las competencias de Vivienda, que ha advertido de que, con el control de precios, "puede haber una detracción del mercado" en la que "muchas de esas viviendas que podrían ser destinadas al alquiler acaben en la compraventa".

En el acuerdo de Gobierno de coalición el PSOE y Unidas Podemos pactaron impulsar "las medidas normativas necesarias para poner techo a las subidas abusivas" del alquiler y habilitar a los ayuntamientos y comunidades a "regular las subidas abusivas del precio del alquiler en las zonas previamente declaradas", y en el acuerdo de Presupuestos ambas formaciones acordaron "regular la contención de las rentas del alquiler en la Ley de Vivienda".

"La vivienda también es un bien de mercado"

Ábalos también ha incidido en que la nueva norma "respete la constitucionalidad", pues "precedentes maximalistas ya han conseguido la posición del Tribunal Constitucional" y también que la ley "tenga en cuenta que es un derecho pero también un bien de mercado que genera actividad económica, que busca también seguridad jurídica al respecto de las inversiones y todo eso no lo podemos obviar".

Asimismo, durante su intervención, Ábalos ha asegurado que el PSOE defiende una política de vivienda "que comprometa a los poderes públicos y no trasfiera esa responsabilidad a los particulares, sean estos más o menos solventes".

"No pensamos que los particulares tengan que resolver la política pública de vivienda, sino al que corresponda, que es al conjunto de las administraciones", ha apostillado el ministro, asegurando que, cuando se plantea la prohibición de los desahucios, deben ser las administraciones "las que procuren alternativa habitacional".

Comparten objetivos, no "herramientas"

"Pensamos que es mucho más positivo incentivar que penalizar, que haya estímulos para que se saquen estas viviendas al mercado del alquiler", ha incidido Ábalos, asegurando que esos incentivos irían dirigidos a aquellos propietarios que ofertan su vivienda "no ya por debajo del precio de mercado, sino por debajo de los índices de referencia que el Ministerio publica".

El ministro ha explicado que en el Gobierno tanto el PSOE como Unidas Podemos coinciden "en los objetivos sobre lo que debe regular la Ley de Vivienda", pero que "puede haber diferencias en las herramientas para conseguir los objetivos".

"No hay por qué correr"

Por otro lado, Ábalos, que ha ofrecido la rueda de prensa como secretario de Organización del PSOE, ha asegurado que la nueva norma "no puede ser una ley coyuntural ni apremiada por situaciones muy concretas y muy coyunturales". "Habrá que entrar en lo estructural, e incluso en el marco que permita adoptar medidas coyunturales, pero que la coyuntura no nos condicione en esa ley básica de la democracia", ha dicho.

Y es que el ministro de Transportes ha destacado que "es bueno para el país tener una Ley de Vivienda" y que "en estos 40 años de democracia no se ha hecho", pero ha apostillado que "si en 40 años no se ha hecho, para hacer una mala ley tampoco hay por qué correr". "Hace falta una ley, pero una buena ley", ha aseverado.

"Mecanismos de contención"

El control de precios en el mercado de alquiler ha sido una constante batalla entre el PSOE y Unidas Podemos, que sin embargo han venido pactando desde 2018 medidas de contención de los precios, las últimas en el propio acuerdo de Gobierno de coalición y para sacar adelante los Presupuestos Generales del Estado de 2021.

En ese último acuerdo ambas formaciones pactaron "regular la contención de las rentas del alquiler en la Ley de Vivienda" y habilitar en ella "mecanismos de contención, o eventualmente bajada de los precios tanto de los nuevos contratos como de los existentes" y, a partir de los precios de referencia "contener subidas injustificadas".

Ese acuerdo, alcanzado a finales del pasado mes de octubre, daba un plazo máximo de tres meses para llevar la Ley a Consejo de Ministros y presentarla en el Congreso en un máximo de cuatro por lo que, en virtud de ese plazo, el Gobierno debía de haber presentado la norma antes de concluir enero.

La respuesta de Podemos

Podemos ha trasladado al PSOE que el ambos acordaron regular el precio del alquiler en la nueva Ley de Vivienda, dado que "lo pactado obliga" y ha calificado de "grave" que el socio de gobierno sea "desleal" a la palabra dada.

Varios cargos de la formación morada han reaccionado en redes sociales a las declaraciones del ministro de Transportes, José Luis Ábalos, después de que haya rechazado el control de precios del alquiler en la futura Ley de Vivienda, al apostar por promover incentivos fiscales, para los cuales espera aún el visto bueno del Ministerio de Hacienda.

La secretaria de Estado para la Agenda 2030 y dirigente de Podemos, Ione Belarra, quien encabeza las negociaciones desde el ala morada del Ejecutivo con el departamento de Ábalos para la nueva ley, ha sido la primera en reaccionar.

En un comentario en Twitter, ha reproducido una parte del acuerdo que alcanzaron Unidas Podemos y PSOE para el borrador de los Presupuestos Generales del Estado para 2021, en el que ambas formaciones se comprometían a "regular la contención de rentas del alquiler en la Ley de Vivienda". "Lo pactado obliga", ha sentenciado.

Posteriormente, el presidente del grupo parlamentario de Unidas Podemos en el Congreso, Jaume Asens, ha comentado que es "grave" que el PSOE sea "desleal" con el acuerdo de coalición, pero aún lo es "más" que tenga esa actitud con cerca de 9.000 organizaciones que solicitaron al Ejecutivo regular el alquiler".

"No nos vamos a dar por vencidos", ha precisado para poner una imagen de una información sobre el texto de diversas organizaciones que demandaban una regulación del alquiler y el apartado del pacto entre los dos socios, que aludía impulsar medidas normativas "para poner techo a la subida del alquiler" en mercados tensionados.

En octubre este asunto volvió a surgir en el pacto para el borrador de los Presupuestos Generales del Estado para 2021, con el compromiso de tener la nueva Ley de Vivienda en tres meses y llevarla al Congreso en cuanto. También se aludía a que la nueva normativa debía limitar, y "eventualmente" bajar, los precios del alquiler para esas zonas.

A ello ha aludido incluso la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, quien ha añadido también que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se comprometió "por escrito" con ella a desplegar esta regulación. "Presidente, cumpla ya su palabra", ha reclamado.

El diputado por Murcia, Javier Sánchez Serna, ha añadido que el PSOE "tiene derecho a cambiar de opinión y abrazar tesis neoliberales como que la vivienda es una mercancía y el mercado se autorregula solo", para especificar luego que el "pequeño problema" es que el pacto de Gobierno "obliga a regular las rentas de alquiler". "Y los pactos están para cumplirlo", ha remachado.

Plazo a punto de vencer

La semana pasada Unidas Podemos reprochó a su socio que continuara "sin hacer una propuesta" sobre la regulación del precio del alquiler, una medida acordada por ambas partes, cuando se está a punto de cumplir el plazo dado para llevar la nueva Ley de Vivienda al Consejo de Ministros.

También afearon, según explicaron a Europa Press fuentes de Unidas Podemos, que el PSOE siga también "sin propuesta" en materia de prohibición de desahucios, control de precios del alquiler y obligaciones para los grandes propietarios.

Precisamente el pasado jueves los equipos de la Vicepresidencia segunda, representada por Belarra, y del Ministerio de Transportes, encabezado por el secretario general para la Agenda Urbana y Vivienda David Lucas, retomaron las negociaciones sobre la ley, dado que los contactos se congelaron por las elecciones catalanas del 14 de febrero.

Cercanía con la patronal

El encuentro no fue satisfactorio para Unidas Podemos. Y es reprocharon que, a pesar de que acordó llevar un texto conjunto al Consejo de Ministros antes de que finalice febrero, el equipo del ministro José Luis Ábalos "todavía concretó por escrito cuál es su posición entorno a los temas clave para los morados".

De hecho, recriminaron que el PSOE parece "muy próximo" es sus planteamientos a los de la Asociación de Propietarios de Viviendas en Alquiler (ASVAL), que dirige el exministro Joan Clos, y al sector inmobiliario.

PSOE y Unidas Podemos ya enfocaban la reactivación de los contactos sobre la Ley de Vivienda con posiciones alejadas que, por el momento, hacen difícil vislumbrar un acuerdo inmediato.

Unidas Podemos apuesta por fijar la figura de gran tenedor a cinco o más viviendas (rebajando la franja pautada en el decreto antidesahucios que apunta a diez o más), obligar a estos grandes propietarios a destinar el 30% de la vivienda social a alquiler social o desplegar un impuesto a la vivienda vacía.

En la formación morada han insistido en diversas ocasiones que su lealtad se debe al acuerdo de coalición y deslizaron que, sin su presencia, los socialistas ya se habrían desviado de este acuerdo. Por tanto, reivindicaron su figura de 'garantes' de los compromisos suscritos.

Además, la materia es una de las principales apuestas, como coproponentes de la normativa, para lograr garantizar este derecho constitucional y hacer corresponsables a los grandes propietarios de pisos de la función social que deben tener los inmuebles.