El ya ex secretario general de CCOO en el la Comunidad Valenciana, Arturo León, ha defendido este miércoles la legalidad y la ética de su vacunación, pero también ha insistido en que quiere preservar "el buen nombre" del sindicato, razón por la cual ha renunciado a su cargo ante la polémica desatada porque se le administrara la primera dosis contra el coronavirus.

León, que no renunciará a recibir la segunda dosis de la vacuna como técnico en riesgos laborales del Hospital de Alicante, ha dicho que su dimisión es una decisión "injusta" en lo personal. Al mismo tiempo, ha explicado el hecho de que su incorporación al Hospital General de Alicante lleve fecha posterior a su vacunación, señalando que "yo planteé la consulta para reincorporarme, y cuando me dijeron que sí, lo planteé por escrito, y luego vino la resolución".

El sindicalista ha explicado que desde hace años ha creído que sería bueno que el personal sanitario en funciones de representación sindical pudiera compaginar la dispensa sindical con uno o dos días de trabajo junto a otros profesionales de la salud, para no perder la práctica sanitaria y también para mantener el contacto con los compañeros.

"Por esa razón gestioné la incorporación parcial. El desfase que hay de fechas se debe al tiempo que transcurrió entre que yo planteé la posibilidad de incorporarme y la contestación que se me da y, por último, la formalización de la resolución de la Conselleria", ha explicado, para rebatir la tesis de que la reincorporación a su puesto fuera una decisión sobrevenida ante el escándalo desatado por la vacunación, como han publicado algunos medios.

"Quería aportar un granito de arena en un momento en que la pandemia está desbordada, especialmente en la provincia de Alicante, la más afectada en el conjunto del Estado, por la especial cercanía que tengo con mis compañeros de Alicante. Ese ha sido mi error, pensar que la decisión de colaborar no se me iba a volver en contra", ha explicado, para luego insistir en que ha cumplido todos los protocolos, como han reconocido, según ha recordado, la portavoz del Consell, Mónica Oltra, y la consellera de Sanidad, Ana Barceló.

Sin embargo, "los que tenemos una representación pública debemos dar ejemplo. Defiendo la legalidad de mi vacunación y también la defiendo desde el punto de vista ético, pero he dimitido para preservar el buen nombre del sindicato", ha dicho León a los medios convocados para explicar su renuncia, anunciada ya el pasado domingo en una nota de prensa.

La rueda de prensa de León se ha producido en una interrupción del Consejo Federal de la organización en cuyo orden del día estaba, en primer lugar, aprobar el informe de gestión del secretario general saliente (incluida su dimisión), que ha obtenido un apoyo casi unánime (121 votos a favor y uno en contra).

Además de los presupuestos y de otros puntos, el orden del día incluye también aprobar la celebración mañana de un Consejo Extraordinario para nombrar al líder provisional del sindicato hasta el Congreso de junio. La elección de esta persona, que dirigirá provisionalmente el sindicato, será probablemente por consenso, según fuentes sindicales. En todo caso, el proceso requiere de unas normas que se han aprobado en el Consejo de esta mañana, entre ellas que las personas que quieran concurrir a la elección deberán contar con unos determinados avales y un tiempo de militancia en el sindicato.