La Fiscalía pide penas de entre 2 años y 2 meses y 4 años y 4 meses de cárcel para siete ultras, entre ellos un cargo de Vox, que atacaron un centro de menores extranjeros no acompañados en El Masnou (Barcelona) en julio de 2019.

Uno de los siete acusados es Jordi de la Fuente, vicesecretario de organización de Vox en Cataluña, que según consta en el escrito de calificación de la Fiscalía, al que ha tenido acceso Efe, fue secretario de organización de la ultraderechista Plataforma per Cataluña y dirigente del Movimiento Social Republicano.

De la Fuente, muy activo en las redes sociales en la difusión de mensajes de Vox, acompañó al actual candidato de este partido a la Generalitat, Ignacio Garriga, al debate electoral de TV3 en vísperas de las elecciones generales de 2019.

Fuentes de Vox consultadas por Efe niegan que De la Fuente sea o haya sido "asesor" de Garriga, señalan que el hecho de que acompañara al candidato al debate de TV3 fue "circunstancial" y precisan que su cargo en el partido es vicesecretario de organización en Cataluña.

En su escrito de calificación, la Fiscalía indica que De la Fuente, además de mostrarse "contrario a la inmigración, al islam y el feminismo" en redes sociales y entrevistas en medios digitales, "participó activamente en movilizaciones contra centros de cultura islámicos y contra la presencia de centros de menores migrantes no acompañados", con un "discurso de ideología de ultraderecha".

La Fiscalía de Mataró-Arenys de Mar pide que se condene a los siete autores del ataque en El Masnou por "fomentar, promover o incitar al odio, la hostilidad, la violencia o la discriminación por motivos de origen nacional" y que se les impongan multas de entre 2.700 y 3.600 euros.

En la causa, abierta por presuntos delitos contra los derechos fundamentales y libertades públicas, resistencia a la autoridad, atentado contra la autoridad, daños y lesiones leves, también están imputados dos manifestantes que apoyaban a los menores extranjeros y que acudieron como reacción al asalto al centro.

Los hechos se remontan al 4 de julio de 2019 cuando, alrededor de las 19.00 horas, tuvo lugar ante el Ayuntamiento de Masnou una protesta en favor de los migrantes no acompañados formada por un centenar de personas que reivindicaba que no se criminalizara al colectivo después de que un menor tutelado hubiera agredido sexualmente a una joven del municipio.

A ese acto se unió otra manifestación contraria a la presencia de los extranjeros en la localidad, que aglutinó a unas 150 personas, entre las cuales los acusados, que coreaban consignas como "vamos a por ellos", "moros de mierda", "vamos a quemar el albergue", "os vamos a matar", expresando un "claro desprecio y animadversión al origen nacional de los menores", según el fiscal.

Durante la protesta, uno de los procesados se bajó los pantalones frente a los Mossos d'Esquadra, mientras otro -Jordi de la Fuente-, fue dando instrucciones al grupo con un megáfono para que se dirigieran al albergue Josep Maria Batista i Roca "El Balquer".

Un trabajador del centro trató de acceder al interior del recinto, pero fue presuntamente agredido por dos de los encausados, que lo tiraron al suelo y le dieron una paliza.

Al mismo tiempo, varios acusados lograron traspasar el cordón policial y accedieron al interior del centro, donde habrían atacado al vigilante de seguridad.

Según el fiscal, los procesados "participaron en estas acciones en el ámbito de una campaña de intolerancia contra los menores migrantes no acompañados que se había fraguado en las redes sociales, actuando movidos por el desprecio que sentían hacia los menores migrantes y con evidente voluntad de ofender su dignidad".

Los acusados y otras personas también lanzaron "numerosas piedras y otros objetos contundentes de forma violenta" contra los menores, el personal del albergue y los policías uniformados.