El ex ministro del Interior Jorge Fernández Díaz aseguró ante el juez de la Audiencia Nacional Manuel García Castellón que no tenía conocimiento alguno de que se hubiera montado un operativo policial para espiar al extesorero del PP Luis Bárcenas, ya que nadie, ni de la Policía ni del partido, ni del Gobierno le informó ni le pidió nada relacionado con la conocida como 'operación Kitchen'. En este sentido, afirmó que solo el presidente del Gobierno, entonces Mariano Rajoy, tenía "autoridad" para plantearle un operativo como este y "no es el caso".

Así lo dijo Fernández Díaz durante su declaración como investigado en la pieza 7 del caso 'Tándem' el pasado 30 de octubre, a cuyo audio ha tenido acceso Europa Press, en la que negó que durante su mandato al frente del Ministerio del Interior tuviera conocimiento de que se montara en 2013 un operativo parapolicial con el objetivo de sustraer al extesorero 'popular' información sensible del partido.

"Si el operativo se hubiera realizado sin yo saberlo hubiese sido una profunda deslealtad hacia mí", subrayó Fernández Díaz. Si bien, el titular del Juzgado Central de Instrucción número 6, le corrigió para indicarle que no se refiriera a la operación investigada "en condicional", ya que la investigación judicial ha ido acreditando "que se realizó".

"Pues yo no lo sabía", lamentó Fernández Díaz durante su declaración que duró algo más de tres horas y en la que quiso "enfatizar" que en el "hipotético caso" en el que alguien le hubiera pedido participar en el espionaje a Bárcenas sólo podría ser Rajoy: "El presidente del Gobierno es quien podía tener autoridad sobre mí para sugerírmelo y no es el caso".

"Si a mí me lo dice el presidente del Gobierno, no digo que se hiciera, yo podría haber hecho dos cosas: decirle 'mira no', o decirle 'pues mira me voy'. Pero es el único que podía hacerme un planteamiento de esos, no un colaborador o un subordinado", explicó el ex ministro del Interior, que quiso dejar claro que el ex jefe del Ejecutivo no le dijo "nada de eso".

Asimismo, añadió que tampoco la entonces ex secretaria general del PP María Dolores de Cospedal -para quien la Fiscalía Anticorrupción ha solicitado su imputación en esta pieza separada del conocido como caso Villarejo- ni nadie del partido "jamás" le habló "de esto". "Nadie ajeno al Ministerio del Interior" le hizo mención alguna del tema por el que está siendo investigado, precisó.

Tampoco el ex secretario de Estado de Seguridad Francisco Martínez, también investigado por la 'Kitchen', ni ningún mando policial le informó del operativo parapolicial sufragado con fondos reservados y para el que se captó como confidente al chófer del extesorero del PP, Sergio Ríos.

Según señaló al juez, los "despachos ordinarios" los mantenía, en especial, con su 'número dos' y con los directores generales de la Policía y de la Guardia Civil, Ignacio Cosidó y Arsenio Fernández de Mesa. En ningún caso con los "operativos", como podía ser el ex director adjunto operativo (DAO) Eugenio Pino, otro de los imputados en por la operación 'Kitchen', salvo en casos excepcionales.

Con todo ello, el juez, tras alabar a Fernández Díaz como ministro del Interior y advirtiendo de que no quería ofenderle, concluyó que "no se enteró de nada de este asunto". "No tiene ninguna indicación ni por arriba, ni por abajo. Pero el otro escalón, que es por el medio, al lado de usted, pero un poquito más abajo, que es el secretario de Estado tampoco", resumió el magistrado.

"De este operativo yo no sabía nada", insistió el exmnistro. "Solo digo sinceramente que yo espero algún día enterarme de por qué se produjo eso, si se produjo", subrayó.

En este sentido, y en otro momento de la declaración, Fernández destacó que él en referencia a este operativo "iba a remolque de las noticias que iban saliendo" en los medios de comunicación. "Fueron tiempos en que no era extraño que salieran noticias de operaciones de Guardia Civil (...) y que afectaban a casos de corrupción política, no era algo nuevo", explicó, al mismo tiempo que apuntó que cuando salía estas publicaciones pedía a su Gabinete información para poder enfrentarse a posibles preguntas en el Congreso de los Diputados o por la prensa.

Fondos reservados

Los fondos reservados también fueron objeto de la declaración. Casi al final del interrogatorio, Fernández Díaz explicó que él se interesó por ellos al llegar al Ministerio y que fue el entonces director del Gabinete de Coordinación y Estudios de la Secretaría de Estado de Seguridad, el coronel de la Guardia Civil Diego Pérez de los Cobos quien le detalló el funcionamiento.

Además, indicó que compareció en Cámara Baja junto al resto de gestores de ese tipo de fondos, y que iban desde el exministro José Manuel García Margallo hasta el que fuera ministro de Defensa Pedro Morenés pasando por el director del CNI Félix Sanz Roldán.

Sobre lo que sabía de esos fondos, apuntó que el presupuesto para Interior era de seis millones de euros anuales que se repartía entre Policía y Guardia Civil a partes iguales y que se entregaba la cantidad proporcional mes a mes. Según detalló, a la entrega de los fondos, recibían una carpeta con los gastos del mes anterior y Pérez de los Cobos comprobaba que coincidía y que se cumplía "la normativa", aunque recalcó que él nunca lo comprobó.

Preguntado por su defensa, ejercida por el abogado Jesús Mandri, sobre si toda la operación 'Kitchen' pudo partir de Francisco Martínez, el exministro no fue tajante y se limitó a decir: "Yo he dicho lo que he dicho, nadie ajeno al ministerio, ni el presidente Rajoy, ni desde el PP María Dolores de Cospedal, nunca, cero".

Asalto del falso cura

Con todo, sí que reconoció que escuchó hablar de la 'Kitchen' y puso como ejemplo el momento en el que un falso cura entró en casa de la familia de Bárcenas armado con una pistola. "Me pareció una barbaridad", dijo, para añadir que se interesó por el tema y que entendió que la información que recibió al respecto estaba siempre "en el marco del Juzgado de Instrucción número 5". "No tenía por qué dudar. Se me hace difícil por sentido común", apuntó.

Fernández Díaz declaró justo un día después del Martínez y negó rotundamente la tesis mantenida por el que fuera su 'número dos', quien defiende que sabía que había un operativo desplegado entorno al extesorero del PP porque el ex ministro del Interior le había pedido recabar información sobre el chófer de Bárcenas.

Antes de dar por terminado el interrogatorio, el juez le dio la palabra a la Fiscalía Anticorrupción. Fue entonces cuando el Ministerio Público pidió que se requiriera el móvil del exministro para poder cotejar si realmente le había mandado a Martínez los mensajes que éste protocolizó ante notario para demostrar su versión.

El ex 'número dos' de Interior explicó al juez de la Audiencia Nacional que registró estos mensajes como método de "precaución" ante su posible imputación en la causa y porque se sintió "dolido" al ver que Fernández Díaz se desvinculaba de la 'Kitchen' en declaraciones a la prensa.