Con la forma de expresarse habitual del magistrado Alfonso Guevara, presidente del tribunal que juzga los atentados de Barcelona y Cambrils de 2017, era solo cuestión de tiempo que se produjera un enfrentamiento con alguna de las partes. Le ha tocado el diputado Jaume Alonso-Cuevillas, abogados de Carles Puigdemont y en este juicio de los padres del niño de tres años muerto en La Rambla, que utilizó la ironía para agradecerle la "amabilidad" con la que le había impedido preguntar por unas actas policiales.

"La ironía a otro lado, se lo advierto", le respondió Guevara, que añadió: "Creo que no he faltado el respeto a ninguno, he elevado el tono, porque no me oían, pero no le he faltado el respeto a nadie. A mí no se me contesta de esa forma. A mí personalmente sí, pero a lo que estoy representando, sí. Si ahora es moda de no respetar las instituciones, aquí se respetan". Concluyó anunciando que estudiará denunciar al letrado al Colegio de Abogados por lo que entendía había sido una falta de respeto.

Guevara se caracteriza por su tono brusco y cortante con los abogados, tanto de la defensa como las acusaciones. El enfrentamiento con Alonso-Cuevillas se produjo cuando este intentaba preguntar a uno de los mossos que interrogó al superviviente de Alcanar, el acusado Mohamed Houli Chemial, por las actas policiales levantadas e impedírselo el letrado, al haber acudido el testigo a propuesta de la defensa en relación con la declaración.