España se adentra blindada en el fin de semana y puente de Todos los Santos con los contagios más disparados que nunca, incesantes augurios de próximos confinamientos generales, muchas dudas, temores repetidos y demasiado cansancio, la famosa "fatiga pandémica" de la que ya nadie se escapa.

El parte sanitario del día sobre la evolución de la epidemia de coronavirus marca un nuevo máximo de notificaciones: 25.595 contagios y 239 muertes (867 en los últimos siete días) que se suman al recuento oficial, en el que los positivos se elevan a 1.185.678 y los fallecidos a 35.878.

Con este aumento de los casos detectados, la incidencia media acumulada en los últimos 14 días por cada 100.000 habitantes (IA14) sube 17 puntos y se aproxima a los 500 (485,2), la ocupación hospitalaria (18.162) se mantiene en el 14,7 %, pero la de las ucis (2.482) sube del 25,8 % al 26,5%.

El ministro de Sanidad, Salvador Illa, que l jueves advertía en el Congreso de un posible confinamiento domiciliario si no cambiaban mucho las cosas en las próximas dos semanas, hoy ha querido ser más optimista: "Pensamos que con las medidas en marcha no va a ser necesario llegar ahí. El decreto del estado de alarma no los prevé".

Pero la realidad de los contagios es la que es, como tantas veces ha repetido el propio Illa y han recordado de forma insistente los epidemiólogos, partidarios desde hace semanas en su gran mayoría de un confinamiento total. Francia ha abierto el camino, que ayer añadió a su hoja de ruta Castilla y León y hoy lo ha hecho Cataluña, que ya tiene el 52 % de las camas de UCI ocupadas por enfermos de covid-19.

"Si vemos en los próximos días que las medidas no son suficientes y los contagios no bajan, pediremos un confinamiento domiciliario", ha asegurado este viernes el secretario general de Salut de la Generalitat, Marc Ramentol, en el primer día de entrada en vigor de las nuevas restricciones a la alemana en Cataluña, que la convierten en la comunidad con medidas más estrictas.

Las dudas de Madrid y las certezas de Cataluña

Cerca de 40 millones de personas residentes en 13 comunidades autónomas no pueden salir desde viernes de sus correspondientes territorios, tras decretar sus presidentes el cierre perimetral acogiéndose al estado de alarma decretado hace cinco días.

Sólo Canarias (con un IA14 de 76), Baleares (212), Galicia (280) y Extremadura (512) han decidido no confinarse, aunque en el caso de la comunidad gallega la Xunta ha aislado a sus siete grandes ciudades (Santiago, A Coruña, Vigo, Ferrol, Pontevedra y Lugo, que se suman a Ourense) hasta el martes, siguiendo el discutido modelo de cierre por días de Madrid.

Ese cierre, autorizado por el Gobierno para los próximo cuatro días pese a que el decreto del estado de alarma fija un mínimo de siete, mantiene vivo el pulso de la presidenta regional, Isabel Díaz Ayuso, con el Ejecutivo, que llevará al Consejo Interterritorial de Salud el miércoles la pertinencia de confinar por días antes de avalar los otros tres anunciados -para sumar 7- por el puente de la Almudena (9N) de la semana que viene.

La decisión de Ayuso ha vuelto a tensar las elásticas relaciones con sus socios de Csque hoy han mostrado todas sus dudas a través de su consejero Ángel Garrido (ex del PP), mientras el alcalde, José Luis Martínez-Almeida, pedía a los madrileños que aprovecharan el puente para salir y consumir, al tiempo que el viceconsejero de Salud, Antonio Zapatero, les conminaba a quedarse en casa.

La recomendación de no salir del domicilio podría convertirse pronto en una prohibición en Cataluña, donde los contagios siguen alcanzando cifras alarmantes con 5.597 nuevos casos y 34 muertes notificados en las últimas 24 horas. Según los datos del Ministerio de Sanidad, la incidencia acumulada es de 714, hay 4.045 personas hospitalizadas y 447 en las ucis.

Cataluña ha estrenado este viernes nuevas restricciones, junto a su confinamiento perimetral y el de sus poblaciones los fines de semana, para tratar de frenar la curva de infecciones, que sigue sin acusar la caída de velocidad de los contagios (de 1,54 a 1,20 en una semana) y los efectos del cierre de las restauración el pasado día 16.

Los 5.000 casos diagnosticados ha superado también este viernes Andalucía (5.104), que tiene una incidencia acumulada de 444 casos con 2.570 pacientes hospitalizados, 345 de ellos en la UCI.

Máximo de contagios se ha registrado asimismo en Castilla y León, que supera los 760 casos por cada 100.000 habitantes en los últimos 14 días, lo que la sitúa como la tercera comunidad que presenta peores datos epidemiológicos, por detrás de Navarra y Aragón, con 1.523 enfermos de covid-19 hospitalizados (22,62 %) y 177 en cuidados intensivos (37,11%).