La decisión está ya tomada. El Gobierno lanzará una reforma de la ley para forzar la renovación del Consejo General del Poder Judicial, ahora mismo bloqueada por el PP. La pretensión del Ejecutivo es promover una modificiación de la norma para que, cuando vence el mandato de cinco años del órgano de gobierno de los jueces, este tenga poderes muy recortados, como le ocurre a cualquier gobierno cuando pasan unas elecciones.

Lo anunció Pedro Sánchez este viernes desde Bruselas, al término del Consejo Europeo. Y no dejó lugar a equívocos. "Es mi intención y es mi voluntad" proceder a un cambio legislativo para sortear el veto del PP, aseguró durante su rueda de prensa desde la embajada española ante la UE.

Sánchez fue preguntado por el informe de la Comisión Europea conocido esta semana, en el que reprochaba a España los retrasos continuados en la renovación del CGPJ —su mandato caducó hace casi dos años y no hay expectativa de relevo—, aunque también expresaba sus dudas sobre la independencia de la Fiscalía General del Estado, porque su actual titular, Dolores Delgado, fue ministra de Justicia de Sánchez y diputada socialista.

El presidente, primero, hizo hincapié en que el informe de la Comisión deja en buena posición a la democracia española, ya que dice que su calidad es "francamente notable" —"pese a que muchas veces nos guste castigarnos"—. Aunque sí que hay "elementos que mejorar", y uno de ellos, incidió, es tener un CGPJ con el mandato caducado desde hace casi dos años.