Escoltados por 24 banderas de España y la Comunidad de Madrid y manteniendo la distancia interpersonal incluso para saludarse: así han escenificado Pedro Sánchez e Isabel Díaz Ayuso su llamada a la cooperación frente a la COVID-19 en rueda de prensa tras el encuentro mantenido este lunes.

Aunque más allá de la atención por el mensaje, las redes sociales. Y es que han sido muchos los que no han dudado en inmortalizar el momento con comentarios satíricos sobre la gestión de la pandemia de coronavirus incluidos.

Protestas en Sol

El presidente del Gobierno se ha desplazado en coche oficial hasta la puerta del histórico edificio de la Real Casa de Correos de la Puerta del Sol, sede de la Comunidad, donde lo esperaban Ayuso, el vicepresidente madrileño, Ignacio Aguado, y el delegado del Gobierno en Madrid, José Manuel Franco.

Sánchez ha saludado a la presidenta madrileña llevándose la mano al corazón, como recomienda la OMS, y ésta ha respondido con un movimiento de brazos.

A unos metros, agolpadas contra las vallas dispuestas por las fuerzas de seguridad, coincidían en la Puerta del Sol dos concentraciones, una de ellas de protesta contra las medidas de restricción de actividad y de movilidad que este lunes han entrado en vigor en 37 áreas sanitarias de la Comunidad.

La otra, que respaldaba el sindicato impulsado por Vox, Solidaridad, la integraban personas con banderas de España que pedían el cese del Gobierno.

Dejando a sus espaldas las protestas y los gritos de "fuera" y "dimisión", Sánchez y Ayuso han subido juntos hasta el Salón Canalejas de la Real Casa de Correos, donde el presidente ha firmado en el Libro de Honor de la Comunidad de Madrid, en el que ha escrito "Al pueblo de Madrid, con profunda gratitud. La unión hace la fuerza".

Una vez finalizado, se han dirigido al patio de la Real Casa de Correos, donde se ha preparado para la ocasión una tarima con 24 banderas, doce de España y doce de la Comunidad de Madrid, que han servido de fondo mientras Sánchez y Ayuso se dirigían a las cámaras.

Concluida la comparecencia, los líderes se han dicho adiós, otra vez a distancia (Sánchez con la mano al corazón, Ayuso con una inclinación de cabeza), enterrando así con los gestos al menos por un día las hostilidades y los tira y afloja que han marcado la relación entre ambos.