La imputación de tres dirigentes de Podemos y del partido como persona jurídica por posibles irregularidades en la contabilidad de la formación provocó el mutismo de Pablo Iglesias. Desde que el pasado martes se publicaran informaciones sobre la investigación abierta, el líder de los morados no ha hablado en público y dejó apartadas las redes sociales. Durante este tiempo han sido otros miembros 'podemistas' los encargados de dar respuesta a las acusaciones. Sin embargo, este viernes, el vicepresidente segundo del Gobierno ha roto su silencio para rechazar cualquier similitud con la financiación irregular del PP y para asegurar que, como en ocasiones anteriores, la causa acabará archivada.

"En esta ocasión, se usan términos como "caja B" o "sobresueldos" para asemejarnos a la corrupción del PP e instalar que 'todos son iguales'", explica Iglesias en una serie de mensajes publicado en Twitter. El secretario general de Podemos trata de frenar así los ataques de los conservadores que piden "la misma vara de medir" que se utilizó para formalizar la moción de censura a Mariano Rajoy.

Al igual que hizo el pasado jueves el secretario de Organización del partido, Alberto Rodríguez, Iglesias ha explicado que en Podemos existe "una Caja de Solidaridad con las donaciones que hacemos todos los cargos públicos" con parte de su sueldo y que "se usa para apoyar a colectivos sociales". Además, añade que su partido es el primero "en España que no pide préstamos a los bancos ni debe nada a las oligarquías económicas".

Colaboración

Iglesias asegura en los mensajes publicado que su formación "está a disposición de las autoridades judiciales" y que colaborará entregando toda la información que se les requiera. "La financiación de Podemos ha sido investigada repetidamente y jamás se ha hallado un indicio de delito", apunta el vicepresidente antes de recordar que muchas otras veces les han acusado de "delitos graves" pero que "el final de todas estas acusaciones es conocido".

En este sentido, defiende que la causa será archivada como todas las anteriores pero que el daño ya estará hecho. "El juicio mediático, a la hora de instalar relatos, pesa siempre más que el final de los procedimientos judiciales", insiste Iglesias que lamenta las portadas de periódicos y las numerosas horas de tertulia "que siembran dudas sobre la financiación de Podemos y la honestidad de sus dirigentes".

"Entendemos que algunos estén muy interesados en que ahora pasemos meses defendiéndonos en los medios de acusaciones sin fundamento, en vez de hablar del debate social sobre la monarquía o sobre cómo emplear los fondos europeos para la reconstrucción", sostiene Iglesias antes de apuntar: "No les vamos a dar ese gusto".