El jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, ha asegurado este martes que está dispuesto a llegar a acuerdos con el PP en el ámbito sanitario, económico y social si "cambia de estrategia" y deja la "bronca" en la que, a su juicio, ha estado instalado estos tres meses junto a Vox. Dicho esto, ha ofrecido que la comisión de evaluación de la pandemia sea un órgano mixto, Congreso y Senado, para que España esté "preparada" en el futuro ante un virus similar.

"Si cambian de estrategia, hacen un giro de 180 grados y pretenden llegar a acuerdos con el Gobierno, no vamos a replantearnos nada porque le respondo que sí, que estamos dispuestos a llegar a acuerdos porque es lo que quieren los ciudadanos", ha respondido Sánchez al portavoz del PP en Senado, Maroto en la sesión de control al Gobierno en la Cámara Baja. En este sentido, Sánchez ha dicho que le "cogía el guante" y que está dispuesto a "dialogar y acordar" con el Partido Popular.

Críticas de Maroto

Sin embargo, el dirigente del PP ha lamentado que el PSOE rechace la propuesta del Grupo Popular para crear una comisión en el Senado que "refuerce los consensos en materia social y económica también entre las comunidades autónomas" tras la crisis del Covid-19 y le ha emplazado a "reconsiderar" su posición.

Así, ha calificado de "error" que el PSOE no acepte esta propuesta del PP porque esta pandemia no la puede resolver solo un gobierno por sí mismo. "Desechar la que planteamos nosotros es un error porque además proviene del partido que tiene el honor y la responsabilidad de gobernar en el ámbito autonómico a la mitad de los españoles, en un momento en que las comunidades autónomas van a tener un papel crucial", ha enfatizado.

Eso sí, ha recalcado que esta posición no es "una sorpresa" porque, según ha dicho, el PSOE ha rechazado todas las propuestas de su formación aunque "algunas las copiaban luego al minuto dos". A su entender, esa actitud supone "despreciar" a muchos españoles que están en contra de que el Gobierno se dedique a "hacer oposición a la oposición".

Maroto ha acusado a Sánchez de vender su "alma política al diablo" al pactar con independentistas y la "extrema-izquierda" para "estar en la Moncloa a cualquier precio". "Ha cambiado la S socialista por la S de sanchista, que es como la S de 'solo me importo yo' y los demás me importan un comino, que por cierto es lo que piensan sus socios de España", ha manifestado.

Además, ha echado en cara a Sánchez los "bulos" del Gobierno acerca de que el PP pretende "derrocar" a su Ejecutivo o de "elevar al máximo la crispación política". También ha acusado al vicepresidente Pablo Iglesias de haberse convertido en un "dinamitador profesional" con tal de que no se hable de su "ineficaz" gestión en las residencias de mayores.

Maroto ha afirmado que los españoles van saliendo de la desescalada pero ha resaltado que Sánchez "sigue en la fase 0 con sus mentiras". "No me extraña que haya socialistas, a los que todavía usted no controla, como Felipe González, que digan que su Gobierno es como el camarote de los hermanos Marx", ha aseverado.

"Nunca es tarde"

En su turno, Sánchez ha respondido a Maroto que "nunca es tarde si la dicha es buena" y ha saludado que el PP hable de acuerdos, ya que su Ejecutivo está dispuesto a llegar a acuerdos con el primer partido de la oposición en "el ámbito sanitario, económico y social".

En este sentido, ha señalado que, si no es una "mera declaración de intenciones", los 'populares' estarán "dando un giro de 180 grados a esa estrategia de confrontación y crispación" de los últimos tres meses y podrán sentarse para "hablar de futuro, de reconstrucción y de recuperación económica y social". "Nosotros hemos hablado siempre de unidad, hemos dicho que la unidad salva vidas", ha enfatizado, para añadir que su Gobierno ha impulsado el diálogo social como evidencian los ERTEs y las prestaciones por cese de actividad a los autónomos.

De la misma manera, Sánchez ha puesto en valor las 14 Conferencias de Presidentes en estas semanas, frente a las seis que se habían celebrado en los 42 años de democracia. A su juicio, eso es una prueba de la voluntad de diálogo que tiene el Gobierno de España.

Dicho esto, Sánchez ha dicho que quería "coger el guante" que lanza el PP en el Senado y ha ofrecido crear una comisión de evaluación mixta Congreso-Senado "para hablar de futuro" en un "debate constructivo" sobre "las cosas que deben aprender de esta pandemia". "Ojalá su grupo se sume a esta comisión", ha espetado a Maroto, si bien ha dicho que "se nota" que al PP le cuesta".

El jefe del Ejecutivo ha afirmado que "lo más importante" es que puedan llegar a acuerdos porque es lo que quiere la ciudadanía en esta situación "tan inédita". "El Gobierno nunca ha rechazado crear esos espacios para dar una oportunidad al acuerdo", ha asegurado, para poner como ejemplo de ello el acuerdo que cerró con Pablo Casado para crear una comisión de reconstrucción en el Congreso.

Eso sí, el presidente del Gobierno ha solicitado a Maroto que diga a la portavoz del PP en el Parlamento Europeo, Dolors Montserrat, que "no se alinee con los halcones europeos y atienda también a las demandas de España".

Y una vez más, Sánchez ha emplazado al PP a "elegir" si quiere "continuar con la bronca" junto a "la ultraderecha" de Vox como, a su juicio, ha ocurrido estos tres meses de pandemia o llegar a acuerdos con el Gobierno. Si opta por este último caso, ha dicho que el Gobierno está "dispuesto a dialogar y a acordar" con el Partido Popular.

Las "mentiras" de Sánchez

Durante la pregunta de control, Maroto también ha afeado a Sánchez que se apoye en "la mentira" en su acción de Gobierno y ha citado en especial que la ministra de Hacienda y portavoz del Ejecutivo, María Jesús Montero, justificara los acuerdos del PSOE con Bildu asegurando que en su día Javier Maroto también había pactado los Presupuestos con Bildu.

"La enorme diferencia entre usted y yo es que para Bildu yo era el enemigo y ahora parece que usted es el amigo", ha recalcado a Sánchez, para insistir en que el gobierno municipal del PP en Vitoria entonces "significaba una amenaza" para la izquierda abertzale pero hoy es "una gran oportunidad" para Bildu el Ejecutivo de Sánchez.

Dicho esto, ha pedido a Sánchez que, "si no encuentra la diferencia, se la estudie" y que no vuelva a "utilizar a nadie del PP para tapar sus vergüenzas en relación con su pacto con Otegi, y mucho menos a alguien que se ha jugado el pellejo como he hecho yo y otros del Partido Socialista por defender allí la libertad".

El presidente del Gobierno ha afirmado después que Maroto había aprovechado su intervención en el Pleno para hacer un "ejercicio de autoanálisis, respondiéndose a sí mismo y su relación con Bildu". "No tengo nada más que decir al respecto", ha resaltado.