Las concentraciones y caceroladas en diferentes puntos de Madrid han continuado por noveno día consecutivo para protestar contra el Ejecutivo, rodeadas de un amplio dispositivo policial desplegado por la Delegación del Gobierno que se mantendrá en los próximos días para vigilar el cumplimiento de las medidas de seguridad por el coronavirus.

Las protestas se han repetido en otros puntos de la región y diferentes ciduades de España, como Sevilla, Valencia o Valladolid.

El aplauso dedicado a los sanitarios a las 20:00 horas, mucho menos secundado este lunes que en jornadas anteriores, ha dejado paso a las caceroladas que en diversos puntos de la ciudad han comenzado antes de las 21:00 horas, y han estado acompañadas de concentraciones en algunas calles.

Gritos de "libertad" y "Gobierno dimisión" han sido las proclamas en todas estas concentraciones, que no cuentan con autorización de la Delegación del Gobierno, y en las que los agentes han pedido a los asistentes que mantuvieran las medidas de distanciamiento y que no cortaran el tráfico de las calzadas.

Núñez de Balboa, epicentro de las protestas los primeros días, ha contado con más de una decena de vehículos policiales y un helicóptero sobrevolando la zona. Este lunes miembros de los convocantes, 'Resistencia Democrática', han leído un manifiesto subidos en un banco del mobiliario urbano.

Al igual que este martes, varios centenares de personas han cortado el tráfico en la sede del PSOE para pedir la dimisión de Pedro Sánchez, y este lunes se ha notado la presencia de los agentes en el edificio del Paseo de la Castellana donde el pasado sábado se desplegó una pancarta de protesta de varios metros con la imagen de Pedro Sánchez con el lema 'Un buen Gobierno obedece'.

Uno de los puntos con más afluencia ha sido el Paseo de la Habana, donde los manifestantes han cortado el tráfico y donde la policía ha tenido que lanzar cinco avisos para que se disolvieran.

La protesta también se ha sentido en la Plaza de Chamberí donde también había presencia policial entre los manifestantes, muchos de ellos portando banderas de España, mientras que en la zona de la Dehesa de la Villa se ha escuchado una cacerolada de unos siete minutos, respondida con música de Ska a todo volumen por otro de los vecinos, según han contado a EFE residentes de la zona.

En Alcorcón, un cordón policial ha intervenido para evitar que se encontraran vecinos que participaban en la protesta y otros contrarios a ellas.

Con más tranquilidad han discurrido las concentraciones en zonas como Montecarmelo, Sanchinarro o Pinar de Chamartín y en municipios de la periferia como Majadahonda o Pozuelo, donde se ha reducido el número de asistentes en comparación con los primeros días.

También la protesta ha llegado a la casa del vicepresidente, Pablo Iglesias, y la ministra Pablo IglesiasIrene Montero en Galapagar, aunque con menos afluencia que el domingo.

Protestas en otras ciudades

Las protestas y 'caceroladas' convocadas para pedir la dimisión de Pedro Sánchez al frente del Gobierno por la gestión de la pandemia del coronavirus se han ido extendiendo por diferentes territorios del país con el paso de los días a pesar de seguir siendo un movimiento minoritario.

Decenas de manifestantes se han concentrado este lunes en la avenida de la Palmera de Sevilla, lo que posteriormente ha derivado en una marcha por esta vía que ha provocado el corte al tránsito rodado de la misma.

Eran mayoría las personas ataviadas con banderas de España y pertrechados con cacerolas y carteles, así como las pertinentes mascarillas. El despliegue humano ha obligado a la Policía Nacional y Local a hacer acto de presencia, aunque no se han reportado incidentes de alteración del orden público, según han confirmado a Europa Press fuentes policiales.

Ciudadanos de la ciudad de Valencia se han vuelto a congregar como las últimas noches noche junto a los cuarteles del paseo de la Alameda a la hora de arriar la bandera, para mostrar su apoyo a las Fuerzas de Seguridad y criticar la actuación del gobierno.

Alrededor de un centenar de personas se han concentrado en Toledo en la calle Méjico, en el barrio de 'Santa Teresa', con banderas de España y exhibiendo y golpeando cacerolas.

El grupo de manifestantes, que han iniciado la protesta a las 20:30 horas, tras una convocatoria a través de las redes sociales, en ningún momento han guardado las distancias de seguridad, de dos metros, que ha reclamado con insistencia las autoridades sanitarias para evitar cualquier contagio por coronavirus.

Las protestas se han extendido por otras ciudades, como Salamanca, Valladolid, Zaragoza, Logroño o Guadalajara.