La vicepresidenta cuarta, Teresa Ribera, ha anunciado que próximamente se aprobará la estrategia española de economía circular que situará por debajo de los 10 millones de toneladas las emisiones de gases invernadero generados por residuos y absorberá parte del desempleo derivado por la pandemia.

Ribera lo ha anunciado este lunes en su comparecencia en la Comisión de Transición Ecológica celebrada en el Senado, donde ha detallado que el plan de Economía Circular está desarrollado para reducir en esta década un 30% el consumo nacional de materiales y alrededor de un 15% la generación de residuos, todo lo cual permitirá que las emisiones de gases invernadero por esta causa no alcancen los 10 millones de toneladas.

Un plan, ha dicho la ministra, que exigirá movilizar inversiones para España de más de dos mil millones de euros y que propiciará la creación de puestos de trabajo "que no requieren de un elevado nivel de especialización", por lo que su puesta en marcha "podría contribuir con rapidez a absorber parte del desempleo generado por la crisis" del coronavirus.

La economía circular, ha aseverado Ribera, es el "pilar central" para el proceso de recuperación económica "en clave ecológica", deberá ir acompañada de nuevos materiales para la industria y un cambio de hábitos en los consumidores y su estrategia se desarrollará en seis sectores: construcción, agroalimentario, pesquero y forestal, industrial, bienes de consumo, turismo y textil.

Todo ello, ha añadido, irá acompañado de un "paquete normativo", de una nueva ley de residuos que, ha dicho, espera sacar a información pública "en las próximas semanas y que debería abordar "el reto" de los plásticos de un solo uso, cuyo crecimiento "nos preocupa enormemente" a raíz de la Covid-19.

En estos momentos "no queremos dejar a nadie atrás" porque está crisis golpea a los más vulnerables, ha manifestado Ribera en otro momento de su alocución y ha añadido que "la ambición verde y social son dos caras de la misma moneda" que, bien gestionadas, se complementan y fortalecen la senda hacia la recuperación económica.

A su juicio, muchos de los ámbitos esenciales de nuestro bienestar se ven afectados por el cambio climático, y así, según estimaciones de la Agencia Europea del Medioambiente, los acontecimientos extremos relacionados con la meteorología y el clima han causado en España perdidas económicas directas superiores 37 millones de euros en los últimos 30 años.

Por ello ha dicho que el proyecto de Ley de Cambio Climático y Transición Energética que remitirá este martes el Gobierno al Congreso, refleja las demandas generales de la sociedad, ya que la ciudadanía quiere ya respuestas a la emergencia climática y aunque "no era el momento que teníamos pensado, si puede ayudar a orientar el debate en torno a la recuperación urgente de nuestra economía".

La futura ley, ha añadido Ribera, ayudará a España a ser "un país resiliente, donde prevalezca el bienestar social y oportunidades para los mas jóvenes y comprometido con la neutralidad de las emisiones en 2050, la movilidad sostenible, energías renovables y a mejorar la gestión de riesgos".

En lo que respecta a movilidad, se ha ofrecido a trabajar en coordinación con el Ministerio de Transportes para conseguir un nuevo modelo que se adapte a la nueva realidad causada por la pandemia, ya sea a pié, con medios de micromovilidad o con vehículos privados, sobre todo los eléctricos que se van a triplicar en los próximos años como también se incrementarán significativamente los puntos de recarga.

Según Ribera, en los últimos tiempos hemos asistido a una "pérdida masiva de biodiversidad" y ahora se propone apostar por la "intervención verde" con actuaciones que ayudarán a crear un buen número de puestos de trabajo y "dignificarán" la solidaridad con el mundo rural.

Ha anunciado también que en 2021 pretende aprobar un nuevo Plan Estratégico de Patrimonio Natural y Biodiversidad y un plan de Humedales que facilitará la conservación de estos espacios y en materia de bosques y zonas verdes, ha apostado por mantener un crecimiento "compatible con los desequilibrios ambientales" y "anticiparnos a los impactos del presente y a las amenazas del futuro" .

Ribera ha avanzado además que a finales de año se aprobará un plan para la protección del Delta del Ebro, una de las joyas mas preciada de los ecosistemas húmedos, que dotará de coherencia el conjunto de intervenciones primando las estructurales que favorecerán la adaptación a los impactos del cambio climático.