El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha participado por videoconferencia en la cumbre de la Unión Europea y los Balcanes Occidentales para fortalecer los vínculos y la "perspectiva europea" de la región y abordar el paquete de ayudas por valor de 3.300 millones de euros para apoyar la gestión del coronavirus y la recuperación económica y social posterior.

En la cumbre han participado jefes de Estado y de Gobierno de los 27 países de la UE los presidentes de las principales instituciones de la UE-Consejo, Comisión y Parlamento Europeos-el Alto Representante para la Política Exterior de la UE, y los jefes de Estado y de Gobierno de los 5 países de los Balcanes (Serbia, Montenegro, Bosnia y Herzegovina, Macedonia del Norte, Albania) más el territorio de Kosovo. La cumbre se ha celebrado sin la presencia de banderas ni carteles identificativos de los participantes por cargo o país para así no tener que distinguir a Kosovo, al que España y otros cuatro países de la UE no reconocen puesto que declaró su independencia de Serbia de manera unilateral en 2008.

Según un comunicado de Moncloa, en su intervención, Sánchez en su lucha contra la pandemia y ha destacado su apoyo a la "perspectiva europea" de la región, animando a los países que la integran a avanzar en las reformas necesarias en línea con los valores y principios europeos, y que son "claves para la estabilidad de nuestro continente", ha dicho.

El presidente ha puesto en valor las buenas relaciones de España con los países balcánicos, así como el potencial económico y valor estratégico de la región, resaltando la posición de la UE como socio prioritario. Sánchez ha subrayado además la importancia de promover la integración y la cooperación regional con el fin de desarrollar políticas que consoliden la reconciliación y colaboración entre los países vecinos, ambos, "elementos también esenciales para reforzar la perspectiva europea de la región", ha dicho.

Además del apoyo financiero para gestionar la crisis del coronavirus y paliar las consecuencias socioeconómicas en la zona, la cumbre ha abordado la necesidad de luchar contra las campañas de desinformación y otras actividades híbridas originarias en países terceros como China o Rusia con las que se pretende "socavar la perspectiva europea en la región", según un reciente informe de un grupo de trabajo del Servicio Europeo de Acción Exterior.