La dirección de Ciudadanos se ha puesto en contacto con el PP gallego para intentar convencerle de que acepte su propuesta de coalición, después de que el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, se quejara de que no se lo hubieran planteado a él directamente y rechazara esa fórmula electoral.

Según han confirmado a Efe fuentes de la gestora de Cs, han hablado por teléfono con la ejecutiva del PP gallego para explicarles su idea de ir juntos a los comicios y desde la dirección autonómica popular les han respondido que esta cuestión la lleva personalmente Feijóo y que el presidente gallego se pondrá en contacto con Cs en los próximos días.

La llamada de la dirección naranja se ha producido justo después de que esta mañana Feijóo, en RNE, criticara que ningún dirigente de Ciudadanos planteará esta cuestión al PP gallego y que se hayan tenido que enterar por los medios de comunicación.

En todo caso, Feijóo, que tiene el respaldo de Génova, no se ha movido ni un milímetro de su postura, ya que sigue rechazando la fórmula de la coalición y solo contempla que puedan integrarse en su candidatura.

Ciudadanos no contempla en ningún caso esta posibilidad y si no prospera su oferta, hay de plazo hasta el 21 de febrero para registrar las coaliciones, se presentarán con su propia marca como hicieron en las pasadas autonómicas, en las que no obtuvieron representación.

Desde Cs aseguran que lo van a intentar hasta el último minuto porque todavía no tienen el no oficial del PP, han subrayado las mismas fuentes, y aunque inicialmente no contemplaban hablar con los populares de Galicia dan este paso para que se vea claro que Cs "va en serio" con su propuesta y que hará todo lo que esté en su mano para sacarla adelante.

Advierten que Feijóo puede perder la mayoría absoluta, tal como reflejan algunas encuestas, y, en cambio, están convencidos de que la suma de fuerzas es un elemento movilizador del voto que evita, además, que se disperse.

Los sufragios que consiga Cs, por pocos que sean, argumentan las fuentes, pueden servir para mantener la mayoría absoluta de los populares y que la Xunta no caiga en manos de los nacionalistas.

En las gallegas de 2016 solo obtuvieron el 3,38 por ciento de los votos (48.103 sufragios) y cero escaños en el Parlamento autonómico, y algo mejor les fue en las generales del 10N (63.571).

También insisten en que la fórmula de la coalición es un paquete electoral para las tres comunidades que celebran elecciones este año y si no se acepta en Galicia no la habrá tampoco en Euskadi o Cataluña, aunque las elecciones catalanas aún no están convocadas y, por tanto, no están abordando ese escenario.