El lobo ibérico está catalogado como especie vulnerable, pero su presencia en la península, antaño tan extendida, es sumamente irregular. Así, mientras en las zonas del sur como Sierra Morena, Sierra de Gata y San Pedro está prácticamente extinto, al norte del Duero representa a menudo un problema para muchos ganaderos que ven sus negocios peligrar ante las mermas constantes de este depredador. Una de esas zonas, donde está prácticamente extinto pero aún así representa un problema para los ganadores, es Álava, donde se cree que sólo queda vivo un ejemplar y aún así la diputación ha extendido un permiso para cazarlo.

El permiso, que da 14 días para hallar al animal y acabar con su vida, ha sido extendido ante las presiones del sector, que asegura que junto a su antigua pareja, que se cree muerta, mató o hirió a 200 animales sólo durante el año pasado. La media supera a la caza de un animal de granja cada dos días, por lo que estos datos siempre han creado cierta controversia en los sectores ecologistas en las redes sociales, donde hay quienes señalan que es poco probable que una pareja de lobos sea tan voraz.

El lobo, el único registrado en toda la provincia, seguiría dando quebraderos de cabeza al sector ganadero de Álava, que ha presionado a la Diputación hasta el punto de que ha extendido este permiso que ha sentado mucha controversia. Desde el Grupo Lobo de Euskadi han creado una petición en Change.org, que a día de hoy acumula más de 100.000 firmas, en la que piden que se deniegue el permiso de caza y en la que afirman que "es totalmente incongruente e irresponsable que mientras está abierto el expediente de catalogación del lobo en el País Vasco, la Diputación alavesa permita la eliminación de ejemplares".

Y es que dentro de sólo cinco días el Gobierno Vasco debatirá si el lobo ibérico debe incluirse en el Catálogo Vasco de Especies Amenazadas, por lo que los más críticos en redes sociales sospechan que "las prisas de la Diputacion por bailarle el agua a los ganaderos pueden venir de ahí".