Los barones regionales del PP han cerrado filas este lunes en torno al discurso de su líder, Pablo Casado, que ha apostado por la moderación y una "mayoría centrada" para unir el voto de la "España razonable", aquella que cree que se encuentra tanto en la izquierda como la derecha.

Tras las críticas que despertaron algunas de las estrategias de la dirección para las elecciones del 28A, en las que varios líderes vieron un escoramiento hacia la derecha para ganar el terreno a Vox, las aguas del partido han vuelto a su cauce ante la perspectiva de una repetición electoral que todos esperan más favorable.

Los distintos líderes del partido consideran que Casado se ha moderado desde entonces, se ha centrado e incluso ha hecho "autocrítica" y ven que su discurso de esta mañana ante el Comité Ejecutivo Nacional es "el de campaña", el que puede llevarles a ganarle el pulso a la izquierda para gobernar.

A la salida de esta reunión, el propio presidente del PP gallego, Alberto Núñez Feijóo, uno de los que ha mostrado en ocasiones sus discrepancias con la línea de la dirección, ha calificado el discurso de Casado de "certero, muy bien construido y muy claro", el que la mayoría de los españoles "necesitaban y esperaban".

También el líder del PP vasco, Alfonso Alonso, ha dicho que le ha gustado mucho la propuesta de Casado de "volver a unir a la gente y hacer políticas desde la moderación", porque ese es el proyecto que "siempre" ha defendido el partido.

Una reunión en la que otra de las líderes territoriales que ha manifestado discrepancias con la línea directiva del partido, Mercedes Fernández, ha decidido dejar su cargo como presidenta del PP asturiano, aunque pasará a formar parte de las listas del PP para las elecciones del 10N, en un puesto aún por determinar.

El resto de los asistentes han acudido a la tradicional comida posterior con el líder del partido para abordar, ya en un ámbito más privado, la estrategia a seguir para las próximas generales, una campaña que el PP aborda con la perspectiva de no hacer grandes mítines, sino "actos pequeños, de calle".

Sobre las listas y los posibles modificaciones de las candidaturas presentadas el 28 de abril, uno de los líderes territoriales apuntaba que habrá "algún cambio seguro" pero que tampoco va a ser "cambiar por cambiar", solo en aquellos casos en los que "proceda".

Uno de estos casos puede ser el de Andalucía, ya que el presidente andaluz, Juanma Moreno, ha reclamado esta mañana que se aproveche para integrar en las listas a "los mejores" y candidatos que tengan "el mayor atractivo electoral" posible.

Entre estas posibilidades figura la de reincorporar a la lista por Huelva a la exministra Fátima Báñez, que algunos ven como una buena opción, e incluso no descartan algún fichaje nuevo, dado que el partido podría incrementar sus resultados en más de 20 escaños con respecto a las pasadas generales, según las encuestas.

En todo caso, los barones son conscientes de que la decisión la tomará la dirección, aunque confían en que se elaboren "las mejores listas posibles", según el presidente murciano, Fernando López Miras, quien ha alabado a Casado también como "el mejor candidato" posible, por lo que las cosas "pintan bien", ha dicho.

Todos esperan que la repetición electoral dé la oportunidad al PP de recuperar votantes, y que la aparición de una nueva opción de izquierda, la liderada por Íñigo Errejón, incrementará la división de la izquierda y perjudicará al presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, al tiempo que favorece al centro derecha.