El portavoz de Vox en el Parlamento de Andalucía, Francisco Serrano, ha subrayado el papel "decisivo" de su formación para el cambio de gobierno en Andalucía, y ha avisado al candidato del PP a la Presidencia de la Junta, Juanma Moreno, de que no darán un "cheque en blanco".

"Entramos en esta casa con el orgullo de ser la fuerza política decisiva que ha propiciado el cambio en Andalucía después de 36 años", ha subrayado entre aplausos desde los escaños de Vox en su primera intervención en la Cámara andaluza, con la que se ha reanudado el debate de investidura.

Tras reprochar al PP su actitud "derrotista, conformista y de resignación" durante los años de gobiernos socialistas en Andalucía, Serrano ha presumido de representar a un partido que ha sido la "herramienta democrática" que ha puesto fin a este periodo.

Durante su intervención ha defendido con orgullo el ideario de Vox y ha advertido de que no van a renunciar a ninguno de sus planteamientos, entre ellos la derogación de las "leyes de género", momento en el que ha acusado a Ciudadanos de haber "despreciado" con su actitud a los 400.000 andaluces que han votado a Vox.

Moreno defiende la legitimidad de Vox y le pide que dé estabilidad al cambio

El candidato del PP a presidir la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, ha defendido la legitimidad de Vox, ha reivindicado el pacto de investidura que han cerrado y ha pedido a esta formación que "encapsule" las diferencias para centrarse en los puntos de encuentro, dando así "estabilidad" al cambio y al Parlamento.

En el debate de investidura, en respuesta al portavoz de Vox en el Parlamento, Francisco Serrano, el dirigente popular ha pedido que sean "útiles a los andaluces" y ha advertido de que necesitan una mayoría parlamentaria estable para que "el cambio se note".

Las imágenes del segundo día en la sesión de investidura de Juanma Moreno. EFE

"Pido a Vox que seamos útiles, que intentemos trabajar en dotar a este Parlamento de una estabilidad", ha dicho Moreno, quien se ha mostrado convencido de que hay "muchos puntos de encuentro".

Moreno, que ha insistido en varias ocasiones en las diferencias entre PP y Vox, ha asegurado que la formación y sus votantes tendrán "todo el respeto" de la Junta y que, como presidente, defenderá "a todos los grupos" que sean atacados, después de que Serrano pidiera que se condenaran "los ataques" que entiende que han sufrido.

Además, Moreno ha explicado que "nadie pide a Vox ni a nadie que renuncie a nada, esa es la grandeza de la democracia".

Ha valorado "el diálogo y el esfuerzo" para conseguir una acuerdo de investidura, a pesar de las "visiones diferentes", y ha contrapuesto el pacto "con luz y taquígrafos" que se ha cerrado con el desconocimiento de lo que el PSOE y el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, está acordando con independentistas y "filoetarras".

También ha denunciado que los socialistas "organicen, planifiquen y financien" unas "movilizaciones preventivas" ante el Parlamento, cuando todavía no se ha constituido el nuevo gobierno, y les ha acusado de "faltar a la verdad y confundir a la opinión pública".

Moreno ha garantizado que no se derogarán leyes de igualdad ni de violencia de género y que no se darán pasos atrás. "En este acuerdo eso no aparece en ningún lado", ha recordado.

El futuro presidente ha desgranado algunos puntos del acuerdo con Vox para preguntarse quién puede oponerse a esas medidas. Entre ellos, ha citado la defensa de España, la creación de empleo de calidad, la lucha contra la corrupción, la estabilidad económica o la condena a los ataques "a cualquier fuerza democrática".

Moreno ha rechazado que la defensa de la familia sea algo "anticuado", que se considere "rancio" proteger las costumbres andaluzas, que son "el legado social, cultural e histórico de muchos años", o que se califique de "retrógrado" proteger la libertad en educación para que "ningún burócrata lo imponga" a los padres.