Rosa Hernández, una mujer afectada por el síndrome post-polio, ha sido desalojada esta mañana de la tribuna de invitados del Congreso al interrumpir el pleno para reivindicar apoyo para los afectados y reclamar más visibilidad del colectivo en el marco del Día Mundial contra la Poliomielitis.
Tras ser desalojada sin incidentes por los servicios de la Cámara, las reivindicaciones de Hernández han sido atendidas a las puertas del Congreso por la ministra de Sanidad, María Luisa Carcedo.
"El sistema responde", ha aseverado la ministra, y ha asegurado que desde el Gobierno están "peleando cada día" por la vacunación, para "combatir el negacionismo de las vacunas", así como con la formación de los profesionales y con la ley de dependencia.
La afectada, en representación de la Plataforma para la polio y síndrome de post-polio, ha leído para Carcedo un manifiesto en el que la plataforma pide "justicia, reconocimiento y resarcimiento", además de médicos "formados", y un "compromiso" firmado por el Gobierno y los distintos grupos parlamentarios para "arreglar" su situación.
Ha explicado que han decidido acudir al pleno porque desde la Plataforma no pueden ir "de puerta en puerta", y para que "todos se enterasen en general".
En sus palabras dirigidas desde la tribuna de invitados del hemciclo, Hernández se ha presentado en representación de los "niños y niñas de la polio" y "víctimas de Franco" a los que no se les dio vacuna "en su momento", y ha pedido a los diputados presentes que "reconozcan lo que pasó".
