El comisario europeo de Asuntos Económicos y Financieros, Pierre Moscovici, ha expresado su "confianza" en que el Gobierno español envíe a Bruselas dentro del plazo, que vence el 15 de octubre, el proyecto de presupuesto para 2019, a pesar de las dificultades para reunir una mayoría parlamentaria.

Tras entrevistarse en La Moncloa con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, durante una hora, el comisario ha valorado lo que considera la "intención" firme de las autoridades españolas de "cumplir con las reglas de juego" y respetar ese calendario.

"Lo mejor para España sería tener un presupuesto para 2019", ha subrayado en un encuentro con los medios durante su visita de trabajo a Madrid.

Moscovici, veterano político socialdemócrata que reconoce su amistad con Pedro Sánchez, no ha querido hablar de cifras -"estamos solo empezando", ha dicho-, pero ha resaltado su deber de objetividad y su voluntad de "ayudar a los gobiernos a respetar las reglas" de la eurozona.

Tras la entrevista, "lo único que puedo decir es que las intenciones van por buen camino". La palabra es "confianza", ha dicho sonriente.

Respecto a la reducción del déficit público, Moscovici ha sido más claro: "España va, por fin, por buen camino, lo cual es muy positivo no solo para España sino para el conjunto de la eurozona".

Se espera que la próxima primavera España salga del procedimiento por déficit excesivo -será el último país de la eurozona en lograrlo-, lo que significa que habrá situado su desequilibrio presupuestario por debajo del 3% del PIB.

Sin entrar en la polémica en torno a las cifras de reducción, ha destacado que, cuando un país deja atrás los déficit públicos excesivos, el objetivo pasa a ser la contención del llamado déficit estructural, es decir, el que no se ve afectado por las alternativas del crecimiento económico.

En ese momento, "el déficit nominal es menos importante que el estructural", ha subrayado Moscovici, porque la disminución de este último es la que permite reducir la deuda pública, la cual, en el caso de España, supone ya el 97% del PIB.

Ese nivel de endeudamiento supone "una fragilidad", ha advertido el comisario, así como "dinero dilapidado", porque cada euro dedicado al servicio de la deuda es un euro "que no se puede invertir en carreteras o en educación".

Moscovici también ha expresado su confianza en que el Gobierno español siga acometiendo reformas. "Nosotros (la Comisión Europea) alentamos las reformas, porque son buenas para España, pero no decimos a los gobiernos lo que deben hacer".