«Se nos ha volado un globo con este broche dentro de la reina infantil. Si alguien lo encuentra contactad con @damesmajors2018». Éste es el mensaje que desde hace varios días corre como la pólvora de whatsapp en whatsapp en Benidorm. O, como también podría decirse, vuela libre de un teléfono a otro en la ciudad, como ya hizo en su día el codiciado objeto que dicho mensaje quiere ayudar a encontrar: una aguja de oro con el nombre «Anna», que el pasado sábado por la noche se voló dentro de un globo de helio en el que estaba escondido como sorpresa.

Los hechos ocurrieron en una conocida finca de Benidorm donde se celebraba la cena de gala de las reinas de las Fiestas Mayores Patronales de 2018, Fátima Carrobles y Anna Calvo. Aquella noche, bajo una cálida luna de agosto, se citaron en Les Palmeres varios centenares de personas entre representantes del mundo de la Fiesta, mayorales, autoridades y amigos de las dos protagonistas de la velada. Degustaron una cena espléndida y compartieron momentos para el recuerdo, principalmente para las quince niñas y dieciséis jóvenes que forman este año las cortes de honor de las Fiestas y que esa noche lucieron radiantes como pocas. Hasta aquí, lo habitual en estos actos.

Pero el sobresalto llegó a los postres. Como también manda la tradición, al finalizar el ágape se inició el momento del clásico intercambio de regalos, donde damas, mayorales o mayorales de honor suelen obsequiar a las reinas mayor e infantil como algún detalle que les sirva como recuerdo de su gran noche. De su gran año.

En esta ocasión, las damas mayores quisieron sorprender a la reina infantil, Anna Calvo, con un broche de oro para sujetar la banda en el que se reproducía su nombre. Según explicaron algunos testigos, porque la niña ya había extraviado en una ocasión el que venía utilizando hasta ese momento.

La joya fue introducida dentro de un globo de helio para que, de esta manera, la pequeña se llevara una sorpresa todavía mayor. Aunque nadie contaba con que la mala suerte provocara que, en el momento de entregar el inflable a la pequeña, éste se les acabara volando de entre las manos con la aguja en su interior.

«¿Y si aparece?»

«Casi nadie sabía que dentro del globo iba el regalo. Cuando se voló, ni caímos en ello, hasta que vimos las caras de las damas y las madres y entonces descubrimos lo que contenía», explicaron ayer testigos presenciales, que también destacan que el globo voló tan rápido que fue imposible reaccionar para intentar recuperarlo.

Inmediatamente, ante la posibilidad de que alguien pudiera encontrar en las siguientes horas el broche, se difundió un mensaje con el texto que encabeza esta información, aunque ahora, varios días después, la mayoría lo dan definitivamente por perdido.

Aunque ninguna fuente quiso concretar ayer el precio del broche, al tratarse de un regalo, algunos conocedores de los hechos apuntan a que el mismo podría rondar los 300 euros.

Pese al trago pasado, Anna no se quedará sin su aguja. Las madres y padres de las damas mayores ya han encargado una joya idéntica a la extraviada, que tienen previsto entregar en pocos días a la reina infantil. Aún así todavía hay quien no pierde la esperanza: «Oye, ¿quién sabe? ¿Y si alguien lo encuentra?», se cuestionan los más optimistas.