La Policía Nacional ha detenido a diecisiete personas en diversas provincias españolas por compartir pornografía infantil a través de salas de chat en internet, en una operación en la que hay otros siete investigados por los mismos hechos, informa este cuerpo.

Para evitar que su actividad ilícita fuese detectada, los arrestados utilizaban un servicio de chat anónimo, cifrado y desechable para intercambiar imágenes de abusos a menores desde diferentes provincias españolas.

Se ha incautado un elevado número de archivos que en ocasiones estaban mezclados con otras prácticas de carácter sexual también extremas como el bestialismo o la zoofilia.

La operación ha concluido con la detención de 17 personas en Zamora (1), Cáceres (2), Pontevedra (2), Barcelona (3), Vizcaya (1), Sevilla (2), Jaén (1), Lugo (1), Alicante (1), Madrid (1), La Rioja (1) y Palma de Mallorca (1).

La investigación, que ha durado casi dos años -la primera detención se produjo en septiembre de 2016-, se inició gracias al estrecho contacto internacional con proveedores de servicios de internet ubicados en todo el mundo y con las policías de diferentes países.

Dentro de dichos contactos se recibe de forma regular una ingente cantidad de información fragmentada acerca de servicios de chat anónimos, cifrados y desechables que permiten crear salas a las que se puede acceder bajo invitación y cuyo contenido se destruye una vez que todos los presentes han dejado la conversación.

Por este motivo los investigadores tuvieron que realizar una minuciosa labor de inteligencia para recomponer información fraccionaria -datos que en principio no son relevantes pero que tras su cruce y estudio minucioso revelan información clave para la investigación- e identificar a los autores, que actuaban desde Cataluña así como desde varias provincias de toda España.

Gracias a las gestiones practicadas se pudo agrupar información relativa a 24 personas que habrían compartido archivos ilícitos a través de estas salas de chat.

Una vez ubicados los autores se llevaron a cabo las correspondientes entradas y registros y las detenciones.

El principal investigado, por el volumen de archivos ilícitos que transmitía a otras personas, fue detenido en Sevilla, desde donde compartía las imágenes ilícitas con otro ciudadano de la misma provincia y que también ha sido arrestado.

También es llamativo el caso de un hombre de Alicante que guardaba cientos de imágenes y vídeos de contenido pornográfico infantil, consistentes en abusos sexuales a menores de edad, algunos de ellos de muy corta edad, o especialmente degradantes.

Este mismo tipo de imágenes se intervinieron al hombre arrestado en Jaén, un varón español de 40 años que estaba en posesión de casi 20.000 archivos de esta temática.

Por otro lado, en Cataluña se localizó a otras cinco de las personas investigadas en esta operación, todos ellas con un número muy significativo de archivos de contenido ilícito.

En Cáceres los agentes detuvieron a un varón de 40 años al que se incautó una memoria USB con más de 8.500 fotografías de abusos sexuales a menores.

Además, en Vigo (Pontevedra) otro de los arrestados simultaneaba sus actividades relacionadas con la pedofilia con el tráfico de sustancias estupefacientes, habiéndole incautado los agentes casi medio kilo de marihuana.

Varios de los arrestados usaban además navegadores de la llamada "deep web" o "internet profunda", lo que ha exigido una investigación muy especializada y minuciosa que ha permitido la detención de los responsables.