El expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont ha reivindicado que el referéndum del 1-O, que este domingo se cumplen seis meses de su celebración, fue "el inicio de una nueva era de la cual no hay retorno posible".

En un mensaje en sus redes sociales recogido por Europa Press, ha lamentado que, seis meses después del referéndum, los miembros del Govern de ese momento son "presos políticos, pero libres de espíritu", y ha calificado el 1-O como una jornada de dignidad popular y barbarie policial.

"La palabra de la ciudadanía no puede ser nunca delito. No escucharos es legal pero inmoral. Seis meses después del 1-O el Govern de Catalunya somos presos políticos, pero libres de espíritu. Esa jornada de dignidad popular y barbarie policial fue el inicio de una nueva era de la cual no hay retorno posible. Ayer, hoy y siempre a vuestro lado #RepúblicaCatalana", ha expresado desde la cárcel en Neumünster.

Además, Puigdemont ha hecho un llamamiento a "seguir adelante" de manera "no violenta" y "civilizada".

"Continuamos con nuestra manera de hacer las cosas, que es la manera no violenta, la manera civilizada, la manera como hemos enseñado todos estos años al mundo cómo los catalanes hacemos las cosas", dijo Puigdemont en su llamamiento, al que tuvo acceso el diputado Dieter Dehm, del partido alemán La Izquierda, durante su visita hoy al expresidente catalán y que fue facilitado a Efe.

Puigdemont llamó asimismo a "no bajar la guardia ante un Estado que se comporta cada vez de una manera más autoritaria y cada vez recortando más derechos fundamentales".

"El mensaje que debemos tener muy claro es que tenemos que seguir adelante, que estamos defendiendo nuestros derechos, derechos que están reconocidos por las Naciones Unidas, que tenemos todo el derecho del mundo a decidir libremente nuestro futuro", afirmó.