El Govern está convencido de que Cataluña seguiría dentro de la Unión Europea (UE) y de la zona euro en un eventual escenario de independencia, que haría necesario crear un Banco Central de Cataluña (BCC) "como autoridad monetaria del nuevo país", con una plantilla de 500 empleados.

El departamento de la Vicepresidencia y de Economía y Hacienda, que dirige Oriol Junqueras, ha elaborado un documento, al que ha tenido acceso EFE, que detalla cómo sería la situación de la economía catalana en una hipotética república.

El texto, que se ha enviado a las delegaciones del Govern en el exterior, subraya que Cataluña difícilmente quedará fuera de la UE y el euro, ya que puede ser expulsada de la Unión Europea "sólo si España la reconoce primero como Estado independiente".

"Pero ello significaría que hay un acuerdo entre Cataluña y España porque el reconocimiento proviene de un acuerdo. Pero si hay un acuerdo de reconocimiento, ¿qué sentido tiene expulsar a Cataluña de la UE? No beneficia a nadie, al contrario, perjudicaría gravemente a España", señala el escrito.

"Probablemente Europa no ponga la alfombra roja a Cataluña desde un primer momento, quizá Cataluña no se verá representada en las instituciones europeas desde el primer día, pero seguro que se encuentra la manera de no perjudicar ni las exportaciones ni las multinacionales europeas establecidas en Cataluña", subraya el texto.

Para el Govern, pues, el escenario de referencia ante una eventual independencia unilateral, "el más probable y deseable", es la permanencia de Cataluña en la UE, bien de manera automática o después de un proceso de negociación simplificado, y la permanencia en el euro.