El secretario general de Unió, Ramon Espadaler, ha anunciado este jueves que su partido descarta presentarse a las elecciones generales del 26 de junio y se concentrará en reconstruir un espacio de "catalanismo centrado" hoy "desarticulado" para representarlo en los próximos comicios catalanes.

Es la decisión que ha adoptado el comité de gobierno de Unió, partido que atraviesa una situación delicada, con un preconcurso de acreedores en marcha, sin representación parlamentaria y que ha sufrido bajas significativas de algunos dirigentes en las últimas semanas.

Una decisión que "no es fácil", ha admitido Espadaler, que ha indicado, en todo caso, que la "brújula" les indica que existe un "espacio político de catalanismo centrado" que está "desarticulado" y que Unió se ve capaz de reconstruir, pero no en el corto plazo que queda para las generales, por lo que la formación se concentrará en este trabajo para concurrir a las próximas elecciones catalanas.

Así, en las elecciones generales, Unió pedirá el voto en blanco, como una manifestación de "disconformidad" ante las opciones políticas que, para los democristianos, suponen renunciar a su concepto de catalanidad y modelo social "centrado", ha dicho Espadaler, acompañado de la portavoz del partido, Montserrat Surroca.

El secretario general ha aseverado que la situación de preconcurso de acreedores ha sido un elemento importante en el debate interno, pero "no es el que ha decantado" la decisión de no presentarse a las elecciones.

La clave, según Espadaler, es que el llamamiento de Unió a sectores de la sociedad para construir un espacio de catalanismo centrado ha tenido "más receptividad" de lo previsto.

Y en estos momentos, a escasas semanas de que empiece la campaña electoral, Unió no quiere, por presentarse a unos comicios, dañar "esta semilla" que aún "no ha caído en tierra fértil y que hay que cuidar un poco más".

"Creo que ha pesado más el hecho de no precipitarlo todo para acabarlo mal. La razón que nos ha llevado a no participar en las generales es para sí participar en las otras -las catalanas-", ha añadido.

La decisión de no concurrir al 26J, tomada "más con la cabeza que con el corazón" tras un debate interno "honesto", en palabras de Espadaler, permitirá así a Unió hacer con más tranquilidad su proceso congresual en dos fases -un congreso para renovar estatutos antes del verano y otro después para la dirección-, articular una propuesta política de catalanismo centrado y equilibrar financieramente al partido, con 19 millones de euros de deuda.