"El 'Alakrana' navega libremente y todos los miembros de la tripulación están sanos y salvos". Así anunciaba ayer el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, la liberación de los 36 tripulantes del atunero vasco que llevaba 47 días en manos de piratas somalíes. Tras una madrugada frenética para los secuestrados, los secuestradores y los negociadores, finalmente la historia tuvo un final feliz, pese a desconocerse el acuerdo al que se llegó con los piratas, pues Zapatero no aclaró este punto, aunque algunas fuentes señalan que podría ascender a 2,7 millones de euros.

Durante toda la madrugada de ayer, se intensificaron los contactos entre los negociadores en tierra y los piratas a bordo del barco para cerrar los últimos flecos del pago del rescate, precipitándose los acontecimientos ya por la mañana, hasta que a las dos de la tarde se produjo la liberación del 'Alakrana'.

La negociación se retrasó más de lo previsto al pedir los negociadores a los piratas una prueba de vida de los 36 marineros, que además de garantizarles que estaban todos con vida, les informaran de que estaban en buen estado de salud.

63 piratas a bordo

El patrón del atunero, Ricardo Blach, informaba por la mañana, poco antes de la liberación, que en su barco se encontraban 63 piratas a la espera de confirmar el pago del rescate y el fin del secuestro. Al parecer, el dinero del rescate se lanzó desde un avión a la cubierta del barco, donde fue recogido por los secuestradores. Todos ellos, una vez cerrado el acuerdo, abandonaron a lo largo de la mañana el pesquero de forma escalonada en pequeños esquifes, huyendo hacia tierra, puesto que el 'Alakrana' se encontraba fondeado a tan sólo 2 millas de la costa somalí.

Únicamente quedaron a bordo cinco secuestradores para garantizar la huida de sus compañeros, que después escaparon en una potente zodiac, protegidos por otra que les prestaba apoyo. Dos helicópteros de la Marina española sobrevolaron la zona supervisando la liberación.

La cercanía de la costa permitió a los piratas mantener durante el secuestro frecuentes viajes entre el barco y sus guardias en tierra. Esta distancia también impidió la actuación de los efectivos militares desplegados a bordo de las fragatas 'Canarias' y 'Méndez Núñez', que permanecían vigilantes a 30 millas del atunero. Este contingente naval mantuvo durante los 47 días un operativo militar preparado para liberar a los tripulantes que garantizara el no poner su vida en riesgo, operativo que también mantuvieron ayer para evitar que el barco fuera recapturado, una vez liberado, según declaró la ministra de Defensa, Carme Chacón, a TVE.

Según señalaron fuentes de Defensa, uno de los helicópteros que despegó de las fragatas disparó contra los piratas que huían a bordo de una de las zodiac con el objetivo de apresarlos. Sin embargo, lograron escapar.

El pesquero viaja ahora, escoltado por las dos fragatas españolas, rumbo a Port Victoria, capital de las islas Seychelles, a 600 millas de distancia, a donde llegarán durante la tarde de mañana jueves. El Gobierno español pondrá un avión de la Fuerzas Aéreas para llevar a los familiares a las islas para encontrarse con los marineros y después regresar todos juntos a España el viernes.

Esta mañana, la ministra Chacón, acompañada del Jefe del estado Mayor de la Defensa, el general ourensano José Julio Rodríguez, y el comandante del Mando de Operaciones, el general Jaime Domínguez Buj, para explicar este operativo militar.

No se descartan detenciones

Por su parte, la vicepresidenta Mª Teresa Fernández de la Vega relató que no se detuvo a los piratas porque la prioridad era liberar a la tripulación garantizando su seguridad e integridad y cuando hubo detenciones es porque no había riesgos. No obstante, apuntó que tras la liberación lo que sí sigue en marcha es la operación militar Atalanta de la UE, que ésta tiene mandato de detener a los piratas y que "muchos días hay detenciones".

En este sentido, admitió que "hasta este momento" el Gobierno no tiene conocimiento de que se haya detenido a ninguno de los 63 piratas que participaron en el secuestro del Alakrana y que no se sabe dónde están: "Si supiéramos donde están los secuestradores en estos momentos, sin riesgo, estarían detenidos por nosotros o por otros países de la operación Atalanta", aseveró.

Evitó precisar si se pagó un rescate alegando que no comentaría lo que dicen los secuestradores y, de hecho, quiso insistir en que el Gobierno actuó "en el marco de la ley". Es más, aseguró que "lo que ha determinado la liberación ha sido la acción concertada y coordinada" del Gobierno, el armador, la diplomacia, las Fuerzas Armadas y los servicios inteligencia de los países de la operación 'Atalanta', además del Gobierno somalí. "Todos hemos trabajado de manera conjunta y actuado de forma coordinada y concertada para hacer posible la liberación, repito, en el marco de la ley", remachó De la Vega.