La presidenta madrileña, Esperanza Aguirre, y el de la Comunidad Valenciana, Francisco Camps, han sido las grandes ausencias en el discurso de clausura de la Convención que ha efectuado el líder, Mariano Rajoy solicitando unidad y limpieza en su partido.

Aguirre alegó motivos familiares para ausentarse de la jornada de clausura, ya que un pariente suyo se encuentra en "delicado estado de salud", según la versión de las fuentes de la dirección.

Camps ha argumentado "razones de agenda", en concreto dos citas, una ayer noche -una cena con el presidente del Banco Santander, Emilio Botín, y el de Ferrari, Luca di Montemezolo- y la otra hoy mismo, en Cheste, en el circuito "Ricardo Tormo", donde están teniendo lugar las pruebas "World Finals" de la escudería italiana con la presencia del piloto Fernando Alonso.

La dirección del PP, según han recalcado las fuentes, no tiene nada que objetar y se encuentra "satisfecha" por la presencia de los dos barones territoriales en la Convención, sobre todo porque asistieron al almuerzo que Rajoy mantuvo ayer con todos los presidentes autonómicos de su partido, así como con los integrantes de la cúpula nacional y Manuel Fraga.

Aguirre llegó al cónclave de los populares en Barcelona acompañada por varios consejeros de su Gobierno y regresó ayer a Madrid, tras el almuerzo, por las razones familiares precisadas antes.

La visita de Camps fue más fugaz, apareció ayer por la mañana, también acompañado por varios integrantes de su Ejecutivo y de su partido en la Comunidad Valenciana, y volvió a la capital de su región terminado el almuerzo con Rajoy y los demás presidentes autonómicos; en total, ha permanecido en Barcelona aproximadamente cinco horas.