En su toma de posesión en la antigua sede de la Comisión Nacional de Telecomunicaciones, Aído estuvo acompañada por la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, la ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, la secretaria general de Políticas de Igualdad, Soledad Murillo, y la secretaria de Estado de Cooperación Internacional, Leire Pajín, entre otros cargos.

Con referencias frecuentes al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, la primera ministra de Igualdad de la historia de España ha recalcado que "lo primordial" y más urgente es la protección de las mujeres maltratadas y el aislamiento social de sus agresores.

La socialista gaditana, de 31 años y la ministra más joven de la democracia, ha dicho que trabajará intensamente y "sin tregua" para que "cualquier cobarde que levante la mano contra una mujer" tenga claro que se enfrenta a 44 millones de españoles, parafraseando las palabras de Rodríguez Zapatero en su discurso de investidura.

Durante su intervención, en el salón de entrada del nuevo ministerio, la ministra ha tenido palabras de agradecimiento a todas aquellas mujeres que en el pasado y en el presente "han peleado" en favor de la igualdad, que debe convertirse en "seña de identidad" del país, una cuestión no sólo de "justicia social", sino uno de los principales motores del desarrollo político, social y moral.

Tras recalcar que este ministerio, situado en la calle Alcála 37, es "necesario" y reconocer los avances y el trabajo realizado en los últimos cuatro años, Aído ha señalado que ello posibilita "un nuevo punto de partida hacia la igualdad real y ejercida".

Por todas las personas que luchan por una sociedad más justa "asumo este reto y lo asumo con pleno sentido de la responsabilidad y del deber, con humildad, con ilusión entusiasmo y determinación", "en esta apasionante etapa", ha añadido la ministra que, a instancias de los gráficos, posó delante del primer cartel que lleva la inscripción del Ministerio de Igualdad.

El final de su discurso lo ha coronado también con las últimas palabras de Rodríguez Zapatero en su primer debate televisivo frente a Mariano Rajoy, al desear a los asistentes "buenas tardes y buena suerte".

Una vez acabado el acto oficial, la ministra, quien hasta ahora ha dirigido la Agencia Andaluza para el Desarrollo del Flamenco, recibió un fuerte abrazo de Fernández de la Vega, que la cogió de la mano, y numerosas felicitaciones de los presentes.