En buena lógica y "con toda la prudencia", afirmó que la situación podría cambiar en "cuatro, cinco o seis meses si se restaura la confianza entre las entidades financieras a la hora de prestarse dinero y si el BCE "relajará" su política de tipos de interés.

El secretario general de Empleo, Antonio González, cree que a partir de verano se reducirá el número de parados.

Para Méndez ese pronóstico tendría "fundamento" siempre y cuando, como mínimo, se den esas dos condiciones.

En cuanto a la desaceleración que vive la economía, opinó que las empresas españolas no la deben ver como un "riesgo", sino como una oportunidad, ya que su situación financiera es mejor que la de las europeas.

"Tienen dinero, hay dinero en las empresas españolas, hay una situación económica solvente y lo que deben de hacer (los empresarios) es invertir esos recursos económicos en ideas distintas al ladrillo", aseguró

Al respecto, estimó que deben destinar ese dinero a proyectos para reforzar el sector industrial y el tecnológico, a mejorar la productividad y a crear empleos más cualificados y con mejores salarios que los que se han creado en los últimos años, "que han sido muchos, pero de menor valor añadido".

Para Méndez, los salarios de los trabajadores también contribuyen a reforzar el crecimiento económico mediante la mejora del poder adquisitivo y de la capacidad de consumo.

El próximo 5 de abril, la Confederación Europea de Sindicatos (CES) ha convocado una "gran manifestación" en Liubliana (Eslovenia) para reclamar una alza general de los sueldos de todos los trabajadores europeos.

La razón de esta movilización es que hay un "contraste muy agudo entre la situación económica de las empresas y los exorbitantes sueldos de los directivos y la evolución de los salarios", avanzó.

Del caso de España, resaltó la diferencia que en materia salarial existe entre hombres y mujeres jóvenes (de más de doscientos euros para una misma categoría profesional) y mostró su esperanza en que los empresarios sean receptivos a que esto se resuelva con la aplicación de la Ley de Igualdad.

Para UGT uno de los objetivos básicos en la negociación colectiva con los empresarios es que muchos trabajadores lleguen a la condición de "mileurista", porque en España hay "muchos" que cobran menos de mil euros, especialmente las trabajadoras jóvenes.

De la precariedad en el empleo, señaló que la reforma laboral acordada por UGT y CCOO con el Gobierno y la CEOE, y que se empezó a aplicar en julio de 2006, ha propiciado que se hayan creado más de 750.000 empleos indefinidos y que se hayan reducido los temporales en 350.000.

Por primera vez en la historia de las relaciones laborales españolas, se ha restringido la contratación temporal y se ha apostado "decididamente" por la indefinida, precisó.

Preguntado por la lucha contra la precariedad en la administración pública, consideró que principalmente se centra en los ayuntamientos, para los que pidió que se les mejore los mecanismos de financiación y el establecimiento de un marco jurídico que les facilite la contratación estable.

Los jóvenes que trabajan en las administraciones públicas sufren una temporalidad superior "al 70 por ciento", recordó.