El hallazgo se produjo entre las 7.30 y las 8.00 horas, cuando el operario se encontraba separando los residuos con una máquina y descubrió el cuerpo sin vida del niño, el cual tenía aún colgando el cordón umbilical.

Sobre las 10.30 horas, una forense del juzgado procedió al examen del cadáver y ordenó su levantamiento y posterior trasladado a un tanatorio para la práctica de la autopsia.

Por su parte, agentes de la unidad de Policía Judicial de la Guardia Civil de Santa Pola se han hecho cargo de la investigación del caso, en el que por el momento no se han practicado detenciones.

Todo apunta a que la madre del niño lo arrojó a un contenedor de basura entre cuyos restos ha aparecido ahora en el vertedero, situado en las inmediaciones del paraje natural de El Hondo.

En un camión

El cadáver del recién nacido que fue hallado en una planta de tratamiento de residuos de Crevillent por un operario llegó anoche a esta instalación en un camión de recogida de basura, según informó a Efe un trabajador de Abornasa, la empresa que gestiona el servicio.