El PSE-EE cerró ayer un principio de acuerdo con el Gobierno Vasco (PNV, EA y EB-IU) para apoyar los presupuestos de la Comunidad autónoma de 2006, por lo que retiró la enmienda a la totalidad que había presentado al proyecto. El pleno del Parlamento Vasco rechazó ayer las otras dos enmiendas presentadas por el PP y el Partido Comunista de las Tierras Vascas (PCTV-EHAK) con lo que el proyecto continuará su tramitación en comisión y, previsiblemente, será aprobado el próximo 29 de diciembre.

El apoyo final de los socialistas al presupuesto del Gobierno Vasco supondrá un vuelco en la política vasca, ya que esto no ocurría desde que se aprobaron las cuentas de 1998, año en el que el PSE-EE abandonó el Ejecutivo vasco. Desde entonces el desencuentro ha sido profundo e incluso los socialistas, al igual que el PP, han llegado sólo a pedir la devolución del proyecto y a no plantear enmiendas parciales a los presupuestos, que en los últimos años han sido prorrogados en varias ocasiones o se han aprobado por las ausencias o los fallos en las votaciones de parlamentarios de la oposición.

Este acuerdo llega, además, la misma semana en la que los gobiernos central y vasco cerraron el compromiso de acometer la mayor obra de infraestructura en la historia del País Vasco, la red de alta velocidad ferroviaria denominada 'Y', que tendrá un coste de unos 4.000 millones de euros. Este acuerdo ha llevado consigo el apoyo del PNV en las Cortes a los presupuestos generales del Estado para el próximo ejercicio.

Durante su intervención ante el pleno de la Cámara, el secretario general de los socialistas vascos, Patxi López, aclaró que este principio de acuerdo "no persigue ni pactos de legislatura ni aspiraciones para ocupar ningún puesto en el gobierno", ya que se circunscribe a los presupuestos del 2006. "Estamos en una etapa política en la que los socialistas queremos responder con actitud positiva y en la que el Gobierno Vasco debe empezar a reconducir sus actitudes y comportamientos", advirtió.

López subrayó que la sociedad vasca "está cansada de tanto conflicto artificial" y que, además de "desear que se acabe con el terrorismo, también anhela el inicio de un camino de tranquilidad y prosperidad de la comunidad vasca". En los pasillos del Parlamento fue saludado este acuerdo por la vicelehendakari, Idoia Zenarruzabeitia, quien dijo que demuestra la "centralidad de este Gobierno".

Zenarruzabeitia insistió en que pese a que el acuerdo actualmente se limita al PSE-EE y a Aralar espera que en el trámite de enmiendas se pueda ampliar el consenso a otras formaciones.

Por contra, la presidenta del PP vasco, María San Gil, se mostró muy crítica con la postura del PSE-EE, partido al que acusó de "renunciar clara y definitivamente a ser la alternativa al Gobierno nacionalista", así como de "asumir el proyecto de país nacionalista del señor Ibarretxe".

También criticó este principio de acuerdo la parlamentaria del PCTV-EHAK Itziar Bazterrika, quien dijo que responde a un "interés partidista", aunque agregó que su grupo sigue abierto a negociar enmiendas parciales.

Desde EA, su secretario general, Unai Ziarreta, apuntó que a su grupo no le sorprendió la postura del PSE-EE, ya que los presupuestos son "progresistas", al tiempo que explicó que trabajarán por lograr el apoyo de EHAK en la votación final, que se celebrará el próximo día 29.

Por último, para el parlamentario de EB, Oskar Matute, es una "buena noticia" que el PSE-EE haya retirado la enmienda a la totalidad.