Alrededor de 800 vecinos de la localidad tinerfeña de Güímar, en el sureste de la isla, permanecían hasta ayer por la tarde sin suministro eléctrico. El paso de la tormenta tropical el pasado lunes llegó a afectar a más de 200.000 personas en Tenerife hasta el miércoles, debido a que el fuerte viento derrumbó muchas torretas de alta tensión de la compañía.
La situación del suministro eléctrico en Tenerife es de "total normalidad" informaron fuentes de la compañía eléctrica Unelco.
Las fuentes señalaron que se repuso todo el suministro eléctrico, y añadieron que "se están atendiendo las averías de baja tensión que comunican los clientes, una vez recuperado el suministro en media tensión".
Unas 600 personas, según la Policía Local, y alrededor de mil en opinión de los convocantes, se manifestaron el sábado por las calles de la capital tinerfeña para protestar por los problemas de suministro eléctrico.
La llegada del suministro eléctrico es provisional, ya que Unelco ha anunciado que se tardará meses en arreglar de forma definitiva los daños ocasionados por la tormenta tropical, y que, según el director general de la compañía, José María Plans, ha sido la mayor avería de la historia.
