La Comunidad tendrá la última palabra para permitir los conciertos en el nuevo recinto Espacio Norte de Murcia

El objetivo era acercar posturas, pero no fue posible. Los vecinos de la urbanización de la Ladera se reunieron el pasado martes, a través de una comisión delegada, con los responsables de la organización de los conciertos en el nuevo espacio con capacidad para 25.000 personas que se va a habilitar en los aledaños del estadio Nueva Condomina. Este proyecto, impulsado por la productora Monkey Pro, ha generado el rechazo frontal de los residentes, que lo ven como una amenaza que vulnera su derecho al descanso. Según una nota informativa de la comunidad de propietarios Finca lo de Casas, durante la reunión el fundador de la promotora, Alberto Vergara, manifestó su interés «en mantener una relación amistosa» con los vecinos para poder celebrar los conciertos que se programen en Condomina sin que estos «ocasionen molestias a los vecinos».

Entre otras cosas, la promotora se comprometió a que el 95 por ciento de los conciertos acaben a las 00.30 horas, y no a altas horas de la madrugada como viene sucediendo en los últimos meses. Además, desde Monkey Pro informaron que los conciertos se desarrollarían desde primavera hasta los meses de septiembre u octubre.

Por su parte, la comisión trasladó la rotunda oposición de los residentes a sufrir los conciertos todos los fines de semana. En la circular que ha sido repartida entre los vecinos afectados, se destaca igualmente que la promotora se encargará de elaborar un informe técnico que incluirá la ubicación exacta del recinto, la orientación del escenario, la colocación del equipo de sonido y las medidas que prevén implantar para paliar las molestias como la instalación de pantallas acústicas.

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Pese a estos compromisos, la comisión asegura que no ha aceptado «condición alguna, ni ha asumido la aceptación de las pretensiones manifestadas por la empresa» y que simplemente han sido «receptores» de sus planteamientos. Por ello, la comisión anuncia que seguirá adelante con el proceso de recogida de firmas (según algunos vecinos ya van cerca de 600) y que llegarán tan lejos como la ley lo permita. «Somos conocedores de que los vecinos no desean tener los conciertos dentro de sus casas todos los fines de semana, aunque finalicen a las 00.30 horas», sentencian.

Cabe destacar que, según la circular, la comisión vecinal tuvo conocimiento durante el encuentro de que la empresa todavía no ha presentado ninguna documentación para la autorización de los conciertos, algo que se hará, aseguraron, cuando se aproximen las fechas.

Según ha podido saber esta Redacción, al tratarse de un espacio abierto sobre terrenos privados, los promotores sólo requieren una ‘autorización (autonómica) de espectáculos públicos y actividades recreativas ocasionales o extraordinarias que tengan un aforo superior a 150 personas’, lo cual es una competencia de la Dirección General de Administración Local. Desde la Comunicación advierten que para dar luz verde a esta clase de eventos «se requiere una exhaustiva documentación tanto al promotor del mismo como a la administración del municipio en el que se celebre dicho evento», en este caso el Ayuntamiento de Murcia, quien debe realizar un informe de viabilidad (no vinculante), que incluye, entre otras cosas, el impacto de la emisión de ruidos sobre la población.

En este sentido, llama la atención que los conciertos requieran una autorización extraordinaria y ocasional, cuando la promotora señala en sus comunicados que está preparando una «programación» de conciertos desde primavera hasta octubre. También sorprende a los vecinos que a pesar de no contar con los permisos, ya se estén vendiendo las entradas de los primeros conciertos: Leiva el sábado 4 de octubre o el de Myke Towers, el viernes 6 de junio.