«Hartos» de que cada vez que se produzca un episodio de fuertes lluvias se queden incomunicados y sin poder salir de casa. Los vecinos de la pedanía murciana de Espinardo están ya «cansados» de exigir las obras y diques oportunos para poner fin a las inundaciones que se producen en la Rambla de Algaramasa que ‘parte’ la citada población cuando se sucede un temporal.

Ante la actual situación, los vecinos se plantean incluso convocar próximamente una manifestación para que se hagan oír por Murcia sus históricas reivindicaciones tras muchos años en los que no se ha atendido a sus demandas. 

«No puede ser que siempre se tenga el pueblo dividido, con el agua metiéndose en casas, en bajos comerciales, y los contenedores desapareciendo entre las riadas que se producen», denuncia José Antonio García Baños, presidente de la Asociación de Vecinos de Espinardo.

«Entendemos que es la Comunidad la que debe coger las riendas de este problema y propiciar, junto al Ayuntamiento, el desvío previsto de la Rambla de la Algaramasa», señala García Baños. El representante de los vecinos insiste en que a lo largo de los años se han puesto sobre la mesa distintas promesas para tratar de solucionar el problema, pero, hasta ahora, «nadie ha hecho nada». 

«El anterior equipo de Gobierno nos prometió las obras para acometer el desvío de la rambla de Espinardo, así como el de las ramblas de Cabezo de Torres o Churra», pero las obras se paralizaron y ahora, afirma, «sigue sin haber respuesta por parte de la actual Corporación».

«Que tanto la Comunidad, como el Ayuntamiento y la Confederación Hidrográfica del Segura se pongan ya manos a la obra porque esto clama al cielo. Es indignante que no haya ni tan siquiera contestaciones», sostiene García Baños.