Las máquinas barredoras de Limpieza Viaria se han convertido en un quebradero de cabeza para los vecinos del centro de la ciudad de Murcia durante las noches de verano.

Con las temperaturas que se han alcanzado en estas últimas semanas, con varias olas de calor consecutivas, muchos ciudadanos aprovechan para abrir las ventanas de casa durante la noche con el objetivo de que la estancia se refresque y poder así conciliar el sueño.

Sin embargo, al abrir las ventanas también se incrementan las molestias de la limpieza nocturna, ya que al mismo tiempo se cuela en las viviendas el ruido de la maquinaria pesada que trabaja durante la noche.

Esto ha ocasionado quejas vecinales, principalmente de la zona centro y el entorno de la calle Correos de Murcia.

En estos puntos, algunos afectados, como José E., indican que el ruido de las máquinas llega a superar las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que establece en 55 decibelios el límite moderado de ruido, llegando a registrarse picos de hasta 68.

Las quejas por las molestias que ocasionan las máquinas de limpieza viaria durante la noche no son algo nuevo, recuerda el presidente de la Asociación No Más Ruido, Pedro Pérez Piernas, quien afirma que llevan años manteniendo reuniones con los respectivos representantes municipales para «exigirles soluciones que no llegan».

Queja al Defensor del Pueblo

Pérez Piernas afirma que la primera queja oficial por este motivo se presentó en 2012 y «desde entonces hemos ido dando varios pasos, hasta acudir al Defensor del Pueblo para que estudiara la situación». Lo que llevó a que el Defensor del Pueblo remitiera un escrito al Ayuntamiento exigiéndole que tomara medidas en dos sentidos: evitar la limpieza en horario nocturno y apostar por maquinaria menos ruidosa.

El representante de No Más Ruido indica que el pasado mes de abril mantuvieron una nueva reunión con la concejala responsable de Movilidad Sostenible y Limpieza Viaria para volver a plantearle la problemática de la limpieza en horario nocturno, «pero parece que no avanzamos», apunta.

Además, señala que «entendemos que los contratos de limpieza son muy extensos, pero por eso mismo hay que tener en cuenta estas situaciones para evitar que el problema se eternice».