Cientos de vecinos de la pedanía murciana de Sangonera la Verde han organizado patrullas vecinales para evitar la ocupación ilegal de un bloque de viviendas en la urbanización El Señorío, 88 pisos propiedad del ‘banco malo’ (Sareb), que permanecen deshabitados desde hace cerca de 10 años.
Según fuentes municipales, los vecinos afectados han denunciado a la Policía Local que ya se habrían producido en las últimas semanas varias incursiones en estas casas ubicadas en este complejo residencial. En uno de estos allanamientos, los okupas habrían llegado a cambiar los bombines de las puertas y a realizar enganches ilegales de luz y agua con el objetivo de poner a la venta de manera irregular estas viviendas.
Ante esta situación, los vecinos han coordinado un sistema de turnos para tener vigilada la zona las 24 horas del día. Todos los días colocan mesas, sillas y sombrillas en el perímetro del bloque residencial, en las inmediaciones de la calle Pedánea Carmen Ros, y allí se concentran día y noche desde el pasado fin de semana. Portan comida y bebida para hacer más llevadera la vigilancia.
Una mujer intentó entrar en uno de los pisos asegurando que lo había comprado por 1.000 euros
Uno de los vecinos que están realizando algunas de esas guardias es el alcalde pedáneo de la localidad, Francisco Noguera, que señala que durante uno de los turnos apareció una señora que quiso acceder a uno de los pisos asegurando ser la propietaria legítima, ya que había comprado «a cierta persona la vivienda por 1.000 euros», indicó Noguera.
Según otras fuentes municipales consultadas por esta Redacción, la Policía Local de Murcia inspeccionó ayer estos inmuebles para comprobar que permanecen vacíos. Desde el Ayuntamiento explican que las patrullas policiales de la zona están vigilando todos los días este complejo residencial en su recorrido, aunque poco más pueden hacer, explican, por tratarse de un bloque residencial propiedad de una entidad bancaria.
La Policía Local colocó un punto fijo en los primeros días
En cuanto se conoció lo que estaba ocurriendo en este bloque residencial de Sangonera la Verde, el alcalde pedáneo, Francisco Noguera, contactó con el concejal de Seguridad Ciudadana, Enrique Lorca. «Sabía que estábamos en un momento muy complicado, en plenas fiestas, pero nos hizo un punto fijo de vigilancia, es decir, que ha estado la Policía desde el sábado por la tarde hasta el lunes al mediodía de manera permanente, incluso realizando allí los cambios de turno». A partir de ese momento, las patrullas policiales realizaron visitas periódicas cada media hora.
La principal reclamación de los vecinos es que vuelva a contratarse a una empresa de seguridad privada para que controle la zona, tal y como ocurría hasta el pasado mes de marzo. De hecho, explicaron los afectados, mientras ha estado operativa esta empresa nunca se había tenido noticia de ninguna incidencia de este tipo.
Según ha explicado a esta Redacción Francisco Noguera, hace pocos días se logró contactar con un representante de la Sareb y al parecer el acuerdo para que una empresa de seguridad se ocupe de la zona está muy próximo. «Quizá mañana esté resuelto, y coloquen las alarmas en todo el perímetro», afirmó Noguera, que admite que le ha sorprendido la reacción y la rápida coordinación de los vecinos. Durante el pasado Bando de la Huerta los vecinos afectados por esta situación dispusieron varias mesas y organizaron una gran comilona, que incluyó, a propuesta del pedáneo, una paella. «Ahí se formó un mini Bando de la Huerta», comenta.
