La película Últimas voluntades arrancó hace unos días su rodaje tras el parón obligatorio que provocó el aumento de casos de coronavirus a mediados de diciembre. La ópera prima del director murciano Joaquín Carmona Hidalgo cuenta con actores de la talla de Fernando Tejero, Àlex Monner, Nerea Camacho y Óscar Casas.
Si ayer fue el turno de Molina de Segura, donde parte del elenco estuvo grabando varias escenas del thriller, hoy ha sido el del castizo barrio de Santa María de Gracia en Murcia. La barriada ha acogido el rodaje de varias secuencias de la película.
Los actores que han participado en las escenas rodadas hoy, entre los que se encontraban Fernando Tejero y Óscar Casas, han levantado una gran expectación entre los vecinos, que se han acercado para comprobar cómo trabajan, así como para pedir que se hicieran fotos con ellos o firmasen autógrafos.
Los trabajos de grabación continuarán en los próximos días en distintos emplazamientos de la Región, como ya se había planeado.
Últimas voluntades es un thriller que narra la historia de un padre que se propone recuperar el amor de su hijo, a quien abandonó cuando este tenía un año de vida. Es una historia de superación y de segundas oportunidades, que se presentará «con la duración media de un largometraje». Se trata, por tanto, del proyecto cinematográfico «más ambicioso de la historia de la Región de Murcia», con un presupuesto que supera el millón de euros, procedentes de fondos privados y públicos. De hecho, esta cinta es una de las grandes apuestas de RTVE en el campo de la cinematografía para el próximo año.
Carmona, que cuenta con una larga carrera en el rodaje de videoclips, anuncios de publicidad y cortometrajes, explicó que una historia de este tipo suele abordarse como un drama, pero quiso transformarla en un thriller que mezcla «géneros, subgéneros y tonos». Sin embargo, el director murciano incidió en que uno de los ejes centrales del proyecto era, simplemente, rodar en la Región para así ayudar a potenciar la industria cinematográfica en esta comunidad y poner en valor la capacidad de los profesionales del sector audiovisual en este territorio. Palabras que refrendó Serrano, que ha contado con la colaboración del albaceteño Helio Mira para darle «un giro» a la historia. El guionista explicó que la idea del filme, cuyo título inicial iba a ser Escoria, surgió cuando vio a un indigente «tirado en la calle» y pensó sobre los «juicios de valor» que se lanzan sobre estas personas sin saber «cómo han llegado allí».
