La concejalía de Urbanismo y Transición Ecológica del ayuntamiento de Murcia está realizando trabajos preventivos y de mejora de la masa forestal del Majal Blanco, el más grande del municipio con casi 875 hectáreas, aprovechando la época invernal, en la que hay un menor peligro de incendio.
En un comunicado, el consistorio murciano ha señalado que esta iniciativa es un proyecto de selvicultura preventiva específico para el parque forestal del Majal Blanco que finalizará a finales de marzo de 2022 y que contempla trabajos preventivos contra incendios forestales, reduciendo la carga de combustible del monte para evitar la continuidad vertical y horizontal del fuego en la masa forestal.
Con la aplicación de estos trabajos se pretende además contribuir a la conservación de la biodiversidad del parque, cuya masa forestal está dominada por el pino carrasco y en menor medida por el pino piñonero, pero también se verán favorecidas zonas de alto valor ambiental, como son los carrascales termófilos.
Otra contribución de estos trabajos sobre el medio ambiente es la preparación para la adaptación al cambio climático, favoreciendo una estructura del arbolado más homogénea, permitiendo su crecimiento en condiciones óptimas y aumentando en definitiva la resiliencia de estos bosques ante posibles sequías y temporales, en sintonía con los objetivos estratégicos aprobados en la Estrategia de Adaptación al Cambio Climático del municipio de Murcia 2030.
De forma directa, estos trabajos, cuyo coste asciende a más de 145.000 euros, permitirán que estos bosques mejoren su capacidad de sumidero de CO2 de la atmósfera.
Otros efectos beneficiosos que generan estos tratamientos preventivos redundan en la cantidad de carbono orgánico del suelo, al incorporar los restos vegetales al mismo, lo que favorece un suelo mejor estructurado para el crecimiento radicular de las plantas.
Los trabajos consistirán principalmente en podas y clareos de zonas del monte, así como la correcta gestión de los residuos generados durante este proceso, previniendo la aparición o focos puntuales de plagas forestales mediante técnicas adecuadas de tratamiento y retirada de la madera del monte.
La generación de estos residuos calculada en el conjunto del proyecto asciende a 1.208 toneladas.
Dependiendo de las zonas de trabajo y de la maquinaria que pueda acceder, los residuos se astillarán para su devolución al suelo o se trocearán en fragmentos no superiores a 50 centímetros con el fin de evitar posibles focos de plagas forestales.
Por último, los residuos más gruesos se apilarán para su acopio y transporte.
