El Plan Especial de Protección del Paseo del Malecón prevé reducir el tráfico rodado en la zona para evitar su deterioro. Para ello, el proyecto contempla la creación de un nuevo vial de acceso a la autovía desde La Arboleja con el que sacar vehículos del centro.

Así lo indicó ayer el concejal de Urbanismo del Ayuntamiento de Murcia, Andrés Guerrero, quien presentó las modificaciones que se han incluido en el Plan iniciado en 2016 tras resolverse las 1.700 alegaciones presentadas por colectivos y vecinos, tras incluir las aportaciones de los grupos políticos y tras adjuntar los informes emitidos por organismos públicos como la CHS, la Comunidad y Bienes Culturales.

«Queremos descargar de automóviles la zona del Malecón para proteger el entorno y para ello se contemplan nuevos viales», explica Guerrero. En el plan inicial se planteó prohibir el paso de vehículos por el cruce de las Cuatro Piedras, pero la alegaciones presentadas por la Junta Municipal de La Arboleja y las manifestaciones que llevaron a cabo los vecinos de la zona hicieron que se replanteara esta opción.

Veinte años después de que el plan especial de protección del Malecón se contemplara en el Plan General de 2002 el equipo de Gobierno quiere darle un impulso para que se convierta en una realidad tras la aprobación provisional del pasado viernes, un documento que supone la quinta versión del proyecto.

Ahora, el siguiente paso será volver a someterlo a exposición pública durante 30 días y que el Servicio de Urbanismo elabore la propuesta final con las alegaciones que se presenten. Tras ello irá a la Comisión de Urbanismo y posteriormente pasará por Pleno.

Petición de nuevas licencias

Una de las medidas que implica la protección del entorno del Malecón es que no se podrán volver a construir nuevas edificaciones y las existentes deberán cumplir unos requisitos estéticos. Por ello, las parcelas actuales pasarán a estar consideradas zona de huerta.

Para que estos espacios sean cultivados por los propietarios se han planteado una serie de subvenciones que hagan atractivo el cambio del uso del suelo así como permutas en otras zona «para que no pierdan los derechos reconocidos», explica el concejal.

Para limitar las nuevas construcciones el Ayuntamiento planteó un año sin licencias urbanísticas que se amplió a un segundo. Pero la ley no permite volver a ampliarlo, por lo que Urbanismo teme que haya un ‘boom’ en la petición de nuevas licencias.