El alcalde de Murcia, el socialista José Antonio Serrano, y el vicealcalde, Mario Gómez, de Ciudadanos, aseguraron ayer que el acuerdo para cambiar los alcaldes pedáneos de las localidades en las que el Partido Popular gobierna con apoyo de los naranjas «está más que cerrado». Los dos dirigentes desmintieron cualquier tipo de desavenencia para llevar a cabo esos cambios. «El acuerdo está más que cerrado», suscribía Gómez, que insistió en que entre ambos socios de gobierno «la coordinación es absoluta» y el trato «cordial». El alcalde insistió además en que si el cambio de poderes «se ha dilatado un poco más de lo esperable» se debe, en buena medida, a ausencias vacacionales de algunos de los vocales.